Hoy en día al pensar en elecciones, participación ciudadana, en el INE o en candidatos, nos llega a la cabeza inminentemente “los partidos políticos”. Sin embargo, me pregunto qué pensamos cuando hablamos de democracia, gobernantes, instituciones, leyes o justicia, para un gran porcentaje de ciudadanas y ciudadanos también nos referimos a políticos.
Es entonces que me parece pertinente hacer un análisis de cómo se relacionan los partidos políticos en actuar cotidiano de las personas y, en su caso, cómo los reflejan en su país, estado, municipio o colonia.
El 31 de enero de este año, venció el plazo para los interesados en manifestar su intención para registrar un partido político nacional, lo anterior, en el Instituto Nacional Electoral, cabe mencionar que al obtener dicho registro cada nuevo partido recibirá la cantidad aproximada de 5 millones de pesos para el 2020, así como 65 millones para el 2021, que sería el año de las elecciones federales, pero se aclara que el registro de nuevos partidos no significa más dinero, al contrario, mientras más partidos existan, a cada uno le corresponde menos cantidad.
Ahora bien, respecto a los grupos que manifestaron su interés, fueron 106 organizaciones de las cuales al final desistieron 4, pero ¿cuáles fueron los requisitos?, en primer lugar, deben de presentar una declaración de principios, sus estatutos y un programa de acción, que básicamente consisten en los derechos y obligaciones internos con los que se regirán, así como los valores fundamentales y rectores de su actuación que sustentan el motivo de ser un partido político y las acciones de trabajo que emprenderán para poder lograr sus objetivos. En segundo lugar, deben contar con 3 mil militantes como mínimo, en al menos 20 entidades, o 300 militantes en 200 distritos electorales uninominales, cabe mencionar, que estos militantes bajo ninguna circunstancia podrán pertenecer a otro partido político y también, el número total de sus militantes en el país no podrá ser inferior al 0.26 del padrón federal; tercero, se deben acreditar sus asambleas mínimo en 20 estados o en 200 distritos electorales, lo anterior verificado por un funcionario del INE y cuarto, de acuerdo a la Ley General de Partidos Políticos se debe celebrar una asamblea nacional constitutiva.
Completados los cuatro puntos anteriores se procede a la manifestación de interés de registrarse como partido político nacional ante el INE, del 7 al 31 de enero de 2019, posteriormente se deben realizar asambleas de febrero a diciembre del mismo año, para enero de 2020, deben presentar la solicitud de registro; asimismo se presenta la declaración de principios, programa de acción y estatutos aprobados por sus afiliados, así como las listas nominales de afiliados por entidades, distritos electorales y las respectivas actas de las asambleas celebradas en las entidades federativas, distritos electorales y la de su asamblea nacional constitutiva. Por su parte, de enero a abril de 2020, se deben expedir los certificados de los nuevos partidos políticos que hayan cumplido con todos los requisitos y el 1 de julio entrarían en vigor los partidos que podrán participar en la elección intermedia de 2021. Es importante mencionar que este tipo de trámite sólo se realiza cada seis años y desde 1990 a 2014 han sido 32 partidos los que han obtenido su registro, de los cuales sólo 8 se mantienen vigentes.
Dentro de las organizaciones que se destacaron en la manifestación de interés, se encuentra la de Redes Sociales Progresistas AC, encabezada por Rene Fugiwara, nieto de Elba Esther Gordillo; la Fundación Alternativa APN, del expriista César Augusto Santiago, Libertad y Responsabilidad Democrática AC, de Margarita Zavala y Felipe Calderón; también Cambiemos MX, de Gabriel Cuadri de la Torre, entre otras.
Es entonces que en el pasado mes de enero, como se había mencionado, se realizó el proceso donde diversas organizaciones a nivel nacional, convocaron a un gran número de ciudadanos para presentarles sus programas y propuestas, para discutirlas y, en su caso, aprobarlas, buscando acreditar el mínimo de afiliados, con miras a formar parte del sistema nacional de partidos y participar en la siguientes elecciones.
Estoy seguro que el día de hoy nos enfrentamos a una sociedad más adversa, las problemáticas sociales, se han incrementado en varios sexenios, nos encontramos con nuevos delitos, nuevos sistemas de procuración de justicia, una muy distinta burocracia y por consiguiente una democracia alternante, que en muchas ocasiones no refleja los principios básicos de una sociedad moderna y solicitante de armonía social. Al pensar en un gobernante, pensamos en un partido político y ésa es una de las causas principales que los ciudadanos adoptan al cumplir con sus ejercicios legales y/o electorales, pero que no necesariamente son un buen antecedente para tomar la decisión acertada, ya que detrás de cualquier partido político, existe la oposición natural, que no es por estatutos, proyectos o planes, sino por el simple hecho de que son contrincantes electorales y eso sin duda, merma a la sociedad para la buena gobernanza, ya que si determinado gobernante propone algún proyecto, la oposición siempre buscará demostrar que no está bien su propuesta y así sucesivamente, lo que entonces el sexenio o trienio se convierte en un ring electoral mientras esté vigente y no se fundamenta en el aspecto primordial de nuestros gobernantes o líderes políticos, el bienestar de todas y todos lo ciudadanos.
Para mi punto de vista, en una verdadera democracia, no es necesario crear más partidos, sino deben constituirse o nuevamente cimentarse en las necesidades de la población, en el entendido, de que los nuevos aspirantes a fundar un partido político nuevo, no son más que el reflejo natural de las carencias que los actuales no han podido resolver, por lo que se justifica en todo su esplendor, su legítimo derecho de manifestar su interés por desear un registro legal de su asociación y/o agrupación.
Pero entonces, ¿qué es un partido político?, como dijimos anteriormente, son agrupaciones u organizaciones con intereses en primera instancia políticos, siguiendo o postulando alguna ideología, deberán promover la participación ciudadana, que sin duda hoy en día, es una de las más difíciles por el desapego que se tiene a los partidos políticos, deben proponer a sus respectivos candidatos que los representen, que en muchas ocasiones desde ese momento para algunos, empieza a fraccionarse el mismo partido, por no ser simpatizante del candidato, o simplemente porque la mayoría quiere llevar las riendas del mismo, posteriormente deben competir en las elecciones con propuestas coherentes, pero de la mano de sus estatutos y aspiraciones partidistas, además que en esencia, sirven para dar fortaleza y seriedad a la política nacional, que en sentido muy estricto, son utilizados como filtros vitales para llegar a la democracia.
Durante muchos años han existido los partidos políticos, desde 1929 con el PRI o 1939 con el PAN, hasta 2014 con MORENA, que ganó la Presidencia de la República con su entonces candidato Andrés Manuel López Obrador, sabemos también que en muchos casos los partidos no han sido perfectos y que han sido obscurecidos con actos de corrupción, autoritarismo, abuso de autoridad, o liderazgos incoherentes y muy alejados de la realidad ciudadana; sin embargo, debemos entender que sin la pluralidad de los partidos políticos la misma democracia no sería viable, ya que la pluralidad política hace que en ningún momento el gobierno se vuelva omnipotente, asimismo, no se debe confundir democracia con partido político, aunque se suplementan son conceptos distintos, pero necesarios para la existencia del principal que sería la democracia.
En nuestro país, durante muchos sexenios pareció que no existía la democracia ya que siempre ganaba el partido que todos conocemos, sin embargo, las sucesivas alternancias nos demostraron que tenemos un país con todos los requisitos democráticos, es cierto, que los partidos hoy en día están desprestigiados, lo que hace que los ciudadanos se desapeguen de los propios políticos y por supuesto ven muy lejana una verdadera democracia en el país, ya que durante mucho tiempo, votaban y seguía pasando lo mismo o empeoraba, por lo que no había diferencia entre los partidos políticos, el día de hoy, con esta nueva alternancia, esperan firmes, esperanzados y convencidos un verdadero cambio, que eso sólo lo dirá el transcurso del sexenio.
Por lo anterior, estoy seguro que el sistema de partidos políticos, necesita un verdadero cambio, rostros nuevos, ideas innovadoras, mentes jóvenes, frescas y preparadas, así como aprovechar la experiencia de muchos, plasmando las acciones de los ciudadanos en planes o estrategias fundamentales, pero mi pregunta es, si esto se puede dar con los partidos políticos que puedan obtener su futuro registro o como lo vimos en estos años, en los candidatos que no ostentan algún partido y son postulados por la vía independiente, esperemos a ver los resultados para la creación de los nuevos partidos, analizando nuestros antecedentes democráticos, las diversas alternancias, los gobernantes, los partidos que se extinguieron, los que siguen vigentes, en fin, me parece buen momento para hacer una reflexión, ¿estamos en una democracia plena?, ¿tenemos una buena pluralidad política?, o simplemente hacernos una pregunta clave: Más partidos… ¿para seguir partidos?