Dos camiones cargados con alimentos y medicinas fueron incendiados en el puente Francisco de Paula Santander, en Ureña, en la frontera colombo-venezolana, acción que fue calificada por el líder legislativo de oposición, Juan Guaidó, como “un crimen de lesa humanidad”.
“Seguimos recibiendo el respaldo de la comunidad internacional, que ha podido ver, con sus propios ojos, cómo el régimen usurpador (de Nicolás Maduro) viola el protocolo de Ginebra, donde se dice claramente que destruir la ayuda humanitaria es un crimen de lesa humanidad”, escribió Guaidó en su cuenta en la red Twitter.
Guaidó, autoproclamado “presidente encargado”, escribió en otro tuit: “El régimen usurpador se vale de los actos más viles e intenta quemar el camión con ayuda humanitaria que se encuentra en Ureña. Nuestros valientes voluntarios están realizando una cadena para salvaguardar la comida y las medicinas. La avalancha humanitaria es indetenible”.
Guaidó se encontraba este sábado en Cúcuta, ciudad fronteriza colombiana, desde donde este sábado coordinó la salida de 14 camiones cargados con alimentos y medicamentos, que intentaban ingresar a Venezuela, frontera que se encuentra custodiada por las fuerzas del orden.
Reportes de prensa detallaron que dos camiones fueron incendiados en el puente Francisco de Paula Santander, en Ureña, en Táchira, donde se registraron intercambios de gases lacrimógenos lanzados por las fuerzas de seguridad, y piedras del lado de los manifestantes.
Sin dar precisiones, los medios presumían que el fuego comenzó por acción de miembros de la Policía Nacional Bolivariana (PNB), en medio de cientos de venezolanos que hacían una cadena humana para facilitar el ingreso de la ayuda a su país.
Ante el incendio, algunos de los voluntarios intentaban traspasar el cargamento hacia otro camión para que los insumos médicos y alimentos no se dañaran, pero ante la columna de humo prefirieron regresarla a Colombia.