Al menos cuatro de cada 10 estadounidenses viven con una mala calidad del aire que pone en riesgo su salud y su vida, reveló el informe anual “Estado del aire 2019”, de la Asociación Estadounidense del Pulmón.
La asociación encontró que más de 141.1 millones de personas vivían en zonas con niveles de aire poco saludables, contaminados por ozono, un aumento de 7.2 millones respecto al reporte precedente.
El informe mostró que hay una clara evidencia de que la calidad del aire empeora en Estados Unidos, luego de años de progreso, en parte debido a los incendios forestales, al uso de motores diésel, por las centrales eléctricas de carbón o dispositivos de combustión de madera, “y patrones climáticos impulsados por el cambio climático”.
Este aumento en la mala calidad del aire es revelador, y apunta a la realidad de que Estados Unidos “debe hacer más para proteger a la población de daños graves e incluso mortales”, alertó el presidente y director ejecutivo de la Asociación Estadunidense del Pulmón, Harold Wimmer.
Consideró que “no hay una señal más clara de que enfrentamos nuevos desafíos en los niveles de contaminación del aire».
Según el reporte, que tomó como referencia los años 2015-a 2017, unas ocho ciudades registraron el mayor número de días con picos no saludables en la contaminación por partículas, desde que se comenzó a monitorear en Estados Unidos la calidad del aire, en 1999.
La asociación informa cada año sobre dos contaminantes del aire más difundidos: ozono y partículas contaminantes, ambos peligroso para la salud pública, incluso pueden ser letales.
En el documento se advirtió que esa mala calidad el aire amenaza la salud de los estadunidenses, en especial de los niños, los adultos mayores y los que viven con una enfermedad pulmonar.
El reporte 2019, reveló que más de 20 millones de personas vivían en zonas que tenían niveles poco saludables de calidad del aire, contaminado por ozono y por partículas.
En Estados Unidos, más de 49.6 millones de personas padecieron picos diarios de contaminación por partículas, poco saludables, en 76 condados, agregó el “Estado del aire”.
Unos 134 millones de personas vivían donde se registraron demasiados días con alto contenido de ozono, el mayor número de personas expuestas desde el informe de 2016.
Este reporte mostró el impacto que tiene el cambio del clima sobre la calidad del aire, ya que la contaminación por ozono se agravó durante los récords mundiales de calor, registrados en el informe de 2019.
La asociación alertó que la contaminación por ozono, conocida como smog, daña los pulmones, provocándole por lo general quemaduras, además las personas presentan dificultad para respirar, tos, asma, lo que pude acortar su vida.
Las ciudades más contaminadas que el informe identificó son: Fairbanks, Alaska; Salinas, California; Santa María-Santa Barbara, California; Missoula, Montana; Bismarck, Dakota del Norte; Bend-Pineville, Oregón; Spokane-Spokane, Washington Valley-Coeur d’Alene, Idaho; y Yakima, Washington.
Mientras que entre las más limpias figuran: Bangor, Maine; Burlington-South Burlington, Vermont: Honolulu, Hawaii; Lincoln-Beatrice, Nebraska; Palm Bay-Melbourne-Titusville, Florida; y Wilmington, Carolina del Norte.
Fotografía tomada de Internet