La Secretaría de Seguridad Pública de Veracruz detuvo a un sujeto acusado de 33 asesinatos cometidos en la entidad, durante un operativo conjunto entre autoridades federales y estatales.
El detenido fue identificado como “El Hueso”, y se le adjudican los asesinatos de 13 taxistas de Nanchital y 20 personas en Cosamaloapan, entre ellos un elemento de la extinta Procuraduría General de la República y la Policía Ministerial.
El sujeto fue detenido junto con otras dos personas en la carretera Las Choapas-Ceiba, tras una denuncia anónima al 911. Los sujetos circulaban en una camioneta robada, en posesión de armas de fuego.
Todo ello fue parte del operativo Unidos para la Construcción de Paz, con la participación de la Secretaría de la Defensa Nacional, la Secretaría de Marina, Armada de México, La Guardia Nacional y la Policía Federal, de la mano de la Secretaría de Seguridad Pública del Estado.
A los detenidos se les vincula con los asesinatos de Antonio Olmas Pérez, Nazareno de la Cruz y Miguel Sáenz del Riego, relacionados con la CTM.
En comunicado temen liberación
En un comunicado emitido al respecto, el Gobierno de Veracruz acusó que la Fiscalía podría liberar a los detenidos. Los sujetos fueron entregados a la autoridad correspondiente, pero en el titular de dicho comunicado se acusa que se podría entorpecer la indagatoria.
“De momento, se continúa con las investigaciones pertinentes y se espera que la Fiscalía General del Estado, encabezada por Jorge Winckler, lleve a cabo su labor, a pesar de que los detenidos han sido señalados por la población de estar presuntamente relacionados con el fiscal regional de Coatzacoalcos”.
Esto es parte del pleito que mantiene el Gobierno de Cuitláhuac García con el fiscal Jorge Winckler, desde que inició el actual gobierno.
La administración del de Morena ha emprendido una campaña de desprestigio contra Winckler, nombrado fiscal durante la gestión de Miguel Ángel Yunes. Winckler, por su parte, ha hecho lo mismo, asegurando que no dejará el cargo pese a las presiones.
