La Semarnat detectó más impactos ambientales negativos que positivos en las distintas fases de la construcción del Aeropuerto de Santa Lucía, en el municipio de Zumpango, Estado de México.
En el Resolutivo de Impacto Ambiental publicado este jueves en la Gaceta Ecológica, la Secretaría del Medio Ambiente y Recursos Naturales informó que, con base en la descripción y evaluación de cada una de las etapas de ejecución del proyecto, se encontró que su construcción dejará en la región 38 impactos adversos significativos por 31 impactos benéficos significativos.
De acuerdo con la dependencia federal, la mayoría de los impactos ambientales adversos se pueden atender con medidas para mitigar, disminuir, prevenir, controlar o compensar las afectaciones; en tanto que para los impactos positivos se planea un programa de preservación de los mismos.
Los impactos negativos de mayor riesgo en la construcción del Aeropuerto de Santa Lucía
El impacto negativo de mayor trascendencia, que estará presente en todas las etapas de desarrollo del proyecto, son las emisiones contaminantes a la atmósfera.
De acuerdo con el reporte, dicho factor tendrá sus puntos más altos de afectación durante la operación del aeropuerto en Santa Lucía y en las obras de interconexión con el Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México (AICM).
El otro ajuste en el ambiente a tomar en cuenta en la ejecución del proyecto es el uso de aguas del acuífero, pues se considera como un impacto negativo el uso que vaya a hacerse del caudal durante la vida útil del proyecto.
La Semarnat estima una posible sobreexplotación del acuífero para cubrir las necesidades del vital líquido de la población circundante.
Los principales impactos ambientales positivos en la construcción del Aeropuerto de Santa Lucía
En cuanto a los impactos positivos, el Resolutivo de Impacto Ambiental destaca tres factores principales: generación de empleos, derrama económica y nivel de ingresos; servicios de transporte aeroportuario y la contratación de mano de obra.
En el tema de la generación de empleos y derrama económica, la Semarnat estima que 70 por ciento de los empleos directos puedan ser ocupados por la población local.
El reporte calcula un aumento en el nivel de ingresos que actualmente percibe la Población Económicamente Activa del área de influencia directa. Dicho incremento también contempla a las actividades del sector terciario (comercio y servicios).
Respecto al impacto por el servicio de transporte aeroportuario, el Resolutivo destaca la satisfacción en la demanda de 18 millones de pasajeros al año con las operaciones relativas de dos aerolíneas para la inauguración de 2021.
En lo que hace a la mano de obra, el resolutivo estima la contratación permanente de empleos durante la vida útil del proyecto, con especial atención en aquellos puestos que requieran de personal especializado y calificado, mismos que se prevén lleguen de otras regiones del país para contribuir con más ingresos y recursos al ciclo económico de la región.
Las afectaciones ambientales en las distintas etapas del proyecto del Aeropuerto de Santa Lucía
El Resolutivo de Impacto Ambiental avalado por la Semarnat fue elaborado por el Instituto de Ingeniería de la Universidad Nacional Autónoma de México y otras agrupaciones civiles.
Otros de los 38 impactos adversos ambientales detectados son, para la etapa de preparación del sitio y construcción:
*Explotación de bancos materiales.
*Disponibilidad de agua.
*Transporte para el desmantelamiento de estructuras existentes,
*Planeación urbana en la adquisición de terrenos aledaños.
En la etapa de operación y mantenimiento del aeropuerto, las principales complicaciones previstas son:
*La emisión de gases de combustión.
*La concentración de partículas suspendidas.
*El aumento en los niveles de ruido por el despegue y aterrizaje de los aviones.
*Abastecimiento de agua para servicios y su planeación.
En la etapa de abandono, pues la Semarnat emitió la vigencia de impacto de ambiental para un mínimo de 30 años y hasta por 50 años, los factores adversos a tomar en cuenta son: la planeación urbana y el cambio de uso de suelos para el desarme de estructuras y la demolición de edificios.
Foto propiedad de: Sedena