En el décimo noveno fin de semana consecutivos de protestas antigubernamentales, un grupo de manifestantes escaló la montaña de 495 metros de altura para colocar a “Lady Liberty”.
La estatua, de casi cuatro metros de alto, representa a una manifestante herida, con una máscara de gas, casco y gafas protectoras, elementos usados en las manifestaciones de las últimas semanas para protegerse de la represión de la policía, que ha disparado gases lacrimógenos y fuego real en su contra.
Lady Liberty porta una enorme pancarta negra en la que se lee la frase: “Revolución de nuestro tiempo, Libérate Hong Kong”, que se puede ver desde debajo de la montaña, y busca inspirar a los manifestantes a mantener su lucha en pro de la democracia, informó Chanel News Asia.
“Con Lady Liberty estamos diciendo a la gente que no debes rendirte. Todos los problemas pueden resolverse con la persistencia y el trabajo duro de la gente de Hong Kong para alcanzar nuestros objetivos”, indicó uno de los manifestantes que llevó la estatua a lo alto del monte Rock Lion.
La Región Especial Administrativa de Hong Kong ha sido golpeado en los últimos cuatro meses por una ola de protestas, a menudo violentas, a favor de la democracia y el fin del control de Beijing.
Las protestas comenzaron en junio pasado en oposición a una ley de extradición, y aunque ya fue suspendidas, los manifestantes han lanzado un movimiento prodemocrático y a favor de la igualdad social en Hong Kong.
Después de casi una semana de relativa calma, luego de los disturbios del fin de semana pasado, cientos de manifestantes con máscaras participaron este domingo una marcha pacífica en el distrito de Kowloon, con leves destrozos en tiendas y bancos de China.
La policía antidisturbios se desplegó en las calles para contener a los manifestantes, que se dispersaron en calma y sin ninguna confrontación importante a última hora del este domingo.