El partido Alternativa para Alemania (AfD, por sus siglas en alemán) presentó hoy una demanda contra la canciller alemana, Angela Merkel, por abuso de cargo debido a sus declaraciones y postura frente al reciente «terremoto político» suscitado en el estado alemán de Turingia.
La denuncia del partido definido en el contexto alemán como de «ultraderecha» ocurre a una semana de que una alianza regional apoyada por la AfD permitiera la elección de un nuevo primer ministro en Turingia, Thommas Kemme-rich, quien se vio obligado a renunciar a las pocas horas tras quedar claro que no podría formar gobierno.
La respuesta de Merkel ante este suceso fue que la alianza resultaba «imperdonable» para el gobierno federal y tras la renuncia de Kemmerich separó a Christian Hirte, de su cargo como Comisionado del Este por haber apoyado el nombramiento de Kemmerich en un mensaje a través de sus redes sociales.
El AfD tomó la decisión de acusar a Merkel por las declaraciones realizadas ante lo ocurrido en Turingia y añadió un cargo más por coacción a Kemmerich, a quien presuntamente habría presionado para renunciar, comentó la dirigencia del partido.
De acuerdo con las acusaciones del partido de ultraderecha, Merkel habría afirmado que su partido «no debía participar en un gobierno bajo el primer ministro electo, Kemmerich».