En el marco de la confirmación delos primeros casos de coronavirus en el país, la arquidiócesis de Monterrey sugirió a los católicos tomar en cuenta precauciones para evitar propagar dicha enfermedad.
El arzobispo Rogelio Cabrera López asumió medidas preventivas, por lo que mencionó que después de dialogar con el Consejo Episcopal, decidieron tomar acciones para procurar por la salud de los regiomontanos.
Una de las indicaciones fue suprimir el saludo de la paz dentro de la celebración de la misa, reemplazándolo por una leve inclinación.
Pidió que los ministros de la comunión, ordinarios o extraordinarios, desinfectarse las manos con gel apropiado antes de administrar la comunión a los fieles, quienes la recibirán en la mano y deberán consumirla frente al ministro.
«Es importante que en la vida cotidiana cada uno de nosotros, de manera responsable, tomemos las precauciones necesarias sin llegar al pánico o la preocupación excesiva, escuchando las indicaciones que las autoridades sanitarias de los diferentes niveles de gobierno nos hacen», manifestó el arzobispo mediante un comunicado.
De igual forma, exhortó la formación de una campaña de oración por el bienestar de los enfermos y del personal sanitario.