Por José Jaime Ruiz
@ruizjosejaime
Harto sospechosimo existe en la llamada que amenaza al periódico Reforma con hacer “volar” sus instalaciones. El 3 de abril publiqué en este espacio:
“La verdadera vocación de Alejandro Junco de la Vega (Reforma/ El Norte / Mural) es la victimización, el martirologio. Para ejercer de mártir hay que ser soberbio. Durante mucho tiempo, desde que le arrebató el periódico a su padre Rodolfo, Junco de la Vega ejerció un periodismo de derecha, crítico y militante, enfrentándose a los presidentes priistas y panistas. Nunca admite equivocarse, hasta cuando miente, tergiversa o distorsiona.”
Preguntas para documentar el sospechosismo:
1.- ¿Graban en Reforma TODAS las llamadas que entran al periódico? ¿O grabar esta llamada fue un caso aislado o se grabó por casualidad?
2.- ¿Ya denunciaron la amenaza a la Fiscalía General y a la procuración de justicia de Baja California? ¿Cuál es el número de los expedientes?
3.- ¿Por qué Reforma no aclara que NUNCA habían recibido una llamada del crimen organizado con “tintes políticos”? En la mayor crisis de seguridad en Nuevo León, ¿por qué huyó Alejandro Junco de Monterrey a San Antonio, Texas? Por acoso y hostigamiento del narco, no de algún político. Una huida que fue duramente criticada en su tiempo por el empresario de Cemex Lorenzo Zambrano.
4.- ¿Hay qué creerle a un tipo que se dice miembro del Cártel de Sinaloa y al mismo tiempo priista? ¿Qué nos dicen los expertos (a los que tanto alude Reforma sin proporcionar, casi nunca, nombres) del mensaje, del tono de voz, de las pausas, de la fonología? ¿Qué existe detrás de esa frase artificial, convenientemente construida: “Todo el Cártel de Sinaloa está con Andrés Manuel López Obrador”…? ¿Favorece a López Obrador o a la derecha y sus voceros?
5.- Las indagatorias, si Alejandro Junco de la Vega lo permite, demostrarán si la llamada tiene sustento y, por tanto, hay que preocuparse, o simplemente fue un montaje de la derecha.
Hay de amenazas a atentados. Busqué en Reforma si habían recordado hoy los tres años del asesinato del periodista Javier Valdez Cárdenas. Nada encontré. En un país donde el narco mata a verdaderos periodistas es una burla el martirologio de Junco de la Vega.
Y luego la acusación injustificada de “Templo Mayor”:
“LA VERDADERA amenaza contra la libertad de prensa no es una llamada telefónica contra un periódico, sino el ambiente de acoso y hostilidad que incubó esa agresión”.
Curioso, hoy minimizan y ningunean la llamada que ayer se desplegó a gritos. Trasladar una amenaza, posiblemente de un loco, como sugiere el embajador de los Estados Unidos en México, Christopher Landau, a que la amenaza directa es del presidente Andrés Manuel López Obrador en contra de Reforma es inferir perversamente algo que no se da, sobre todo cuando no existe un ambiente de acoso y hostilidad sino de una deliberación nacional sobre el rumbo del país.
¿No recuerda Alejandro el acoso que sufrió su padre Rodolfo por el empresario Eugenio Garza Sada y su grupo de interés al quitarle la publicidad a El Norte? ¿No recuerda Alejandro cuando tuvieron que prescindir de PIPSA y comprar papel en el extranjero, esa vez sí, por el acoso y hostigamiento?
“Durante las décadas de 1970s, 1980s y 1990s El Norte obtuvo importantes éxitos al denunciar la corrupción en el gobierno. Debido a sus principios de periodismo independiente, el gobierno federal recortó el papel para imprimir el periódico, por lo que la compañía tenía que importarlo directamente” (Cfr. Wikipedia).
Esos sí eran acosos reales, no las fantasías animadas de ayer y hoy de la 4T.
Continua “Templo Mayor”:
“TANTO organismos de derechos humanos como de protección a los periodistas han advertido sobre ese clima adverso que, cada mañana, se impulsa contra los medios que no son incondicionales del régimen. A los ataques presidenciales se suman las campañas en redes sociales que buscan denostar a los críticos, distorsionar la realidad, acallar las noticias.”
Lo cierto es que Junco de la Vega trata de confundir. El debate público admite el disenso y eso siempre lo ha manifestado y promovido Andrés Manuel. Si existe un acoso y hostigamiento periodístico es en contra de López Obrador por parte de Reforma, todos los días. Mientras el presidente aguanta vara, el dueño de Reforma, junto con su séquito de colaboradores (a)crítcos, se rasgan las vestiduras.
Alejandro, como le escribí a Denise Dresser, deja de gritar y mejora tus argumentos, A ver, dinos, ¿cuál noticia de Reforma ha acallado Andrés Manuel López Obrador? Dinos, sé bueno, al menos una… y podremos creer en tu vocación de plañidera.