La estimación de decrecimiento económico del Banco de México de -8.8% puede ser aún más profunda, como resultado de la inacción del gobierno, coincidieron especialistas de la Concamin y de la Canacintra.
El presidente de Fomento Industrial de la Cámara Nacional de la Industria de la Transformación (Canacintra), Juan Manuel Chaparro Romero, aseguró que el gobierno se hace de lado, de una forma muy simple, al decir que si una empresa quiebra que los empresarios asuman su responsabilidad.
«El deterioro de la economía mexicana sigue prolongando su caída iniciada desde principios del año 2019 y ahora alterada por la presencia de la pandemia coronavirus, sigue afectando a miles de empresas y trabajadores del país y es hora que a casi mitad de año 2020, los apoyos tributarios y fiscales solicitados por el sector empresarial para que las empresas productivas formales instaladas en México siguen sin aparecer», dijo.
Ante ello, el pronóstico de -8.8% del Banco de México quedará corto porque realmente podrá alcanzarse -10% en el 2020, sobre todo porque la economía mexicana ya está en terreno recesivo con -2.2% en el primer trimestre del año.
Existe «la posibilidad de acercarse o rebasar la frontera de los dos dígitos del menos -10% para finales del último trimestre de este año y esto será una realidad si el gobierno sigue siendo pasivo y deja transcurrir más y más tiempo para actuar con estos apoyos solicitados. Y una recuperación económica para los siguientes meses o años sería muy lenta, desde este nivel de decrecimiento del PIB».
El presidente del Comisión de Estudios Económicos de la Confederación de Cámaras Industriales (Concamin), José Luis de la Cruz, dijo que «si no hacemos algo las tendencias se van a exacerbar», además de que hay que reconocer que el gobierno no tendrá dinero porque caerán sus ingresos.
El también director general del Instituto para el Desarrollo Industrial y el Crecimiento Económico (Idic) expuso que no habrá ingresos excedentes por exportaciones petroleras, sobre todo por la caída en precios que tuvo el precio del barril de petróleo al principio de la cuarentena por el Covid-19.
Son casi 2 millones y medio de empleos que se perderían y considerando que haya una reactivación de la economía «nos llevaría seis años reponer las pérdidas de 2020 en materia laboral».
«Cuando hacemos el análisis de los supuestos quizá se esté subestimando la magnitud de la recesión, aún y cuando se tiene -8.8%», porque «vamos a ver el costo de no tener una política contracíclica, por la no intervención del Estado».
