Este domingo culmina la Liga MX con choque de vuelta de la final entre dos organizaciones que buscan reescribir su historia en el futbol mexicano, Cruz Azul y Santos, en la cancha del Estadio Azteca.
El cuadro capitalino ha demostrado ser el mejor equipo del agonizante certamen al solamente acumular (entre fase regular y liguilla) tres derrotas ante Toluca, Puebla y los mismos Laguneros. Por tanto, luego de vencer por 0-1 en el juego de ida como visitantes, las probabilidades azules de romper la malaria de casi 24 años sin poder ganar la liga parecen altas.
Sin embargo, tras perder seis finales consecutivas —en la cuales sólo han podido ganar el primer juego una vez ante América por 1-0 en el Clausura 2013—, los Cementeros están conscientes de que no pueden confiarse.
«Sabemos lo que ha pasado con el club, pero eso es pasado. Queremos dejar en lo más alto al Cruz Azul y todos los compañeros queremos quedar en lo más alto de su historia», dijo el mediocampista, Orbelín Pineda.
Contrario a lo sucedido en las finales anteriores, en las que diversos errores les han costado el campeonato, en esta ocasión el desempeño defensivo de La Máquina durante las dos etapas de la competencia (donde fueron los mejores aceptando sólo 11 goles), hace que la percepción en torno al equipó sea mucho más optimista.
Del otro lado de la cancha los Guerreros de Torreón se presentan tras superar varios escollos desde la repesca, pero el equipo de Guillermo Almada ha perdido algo de brillo en los dos pasados encuentros (semifinal de vuelta ante Puebla e ida con Cruz Azul) al perder por 1-0 en ambos cotejos.
En consonancia, el equipo coahuilense únicamente pudo obtener un triunfo como visitante durante toda la campaña, pero esto no hace mella en el seno albiverde. «Vamos a presionar, proponer el juego y buscar el gol. Sabemos que fuera de casa no nos ha ido tan bien, pero confiamos para este encuentro. Tenemos una oportunidad, 90 minutos para meter gol. Podemos ganar, así como ellos [Cruz Azul] lo hicieron acá [en Torreón]», aseguró el defensa de Santos Matheus Doria.
Además, la organización verdiblanca presume una rica historia en la que acumulan varios éxitos en menos de 25 años, de hecho, los Comarqueños han disputado once finales, casi nunca como favoritos (salvo ante Pachuca), y han logrado seis campeonatos.
A pesar de esto, los de Torreón no ha podido revertir un marcador en contra para ungirse como campeón (salvo en los lejanísimos Invierno 96 y Verano 2001 cuando derrotaron a Necaxa y Pachuca respectivamente). Por lo que en la presente final están pisando terreno casi desconocido.
Así pues, con todos los ingredientes sobre la mesa sólo resta que este domingo en punto de las 20:15 horas ambos equipos busquen hacer historia y nos brinden un encuentro apoteósico para abrochar el Guardianes 2021.