El presidente López Obrador dijo que ya sentó las bases de la 4T y aseguró que los conservadores difícilmente podrían echarlas para atrás. Por lo que podría dejar la silla presidencial en este momento e irse tranquilo.
El presidente Andrés Manuel López Obrador aseguró que podría dejar la Presidencia de la República en este momento, sin sentirse “mal con [su] conciencia”; pues ya sentó las bases de la cuarta transformación.
“A sólo 2 años y 9 meses de ocupar la presidencia puedo afirmar que ya logramos ese objetivo”, expresó durante la presentación de su Tercer Informe de Gobierno.
El jefe del Ejecutivo mencionó que es “un timbre de orgullo” que su gobierno no dejó de trabajar para consumar la 4T en la vida pública del país; a pesar de la crisis sanitaria y económica que provocó la pandemia de Covid-19.
En este sentido, subrayó que hubo un avance porque combatió “la peste de la corrupción” que ha dañado al país y a su pueblo. El primer mandatario afirmó que no se tolera ese delito, ni se permite la impunidad. También agregó que no hay fueros, ni privilegios.
El gobierno representa a todos, no a una minoría, como antes
Además, señaló que ahora se respeta la Constitución, hay legalidad y democracia; se garantizan las libertades y el derecho a disentir; hay transparencia plena y derecho a la información; no censura a nadie, ni se violan los derechos humanos.
“El gobierno no reprime al pueblo y no se organizan fraudes electorales desde el poder federal. El poder público ya no representa, como antes, a una minoría; sino a todos los mexicanos de todas las clases, culturas y creencias. Se gobierna con austeridad y autoridad moral”, expresó.
López Obrador dijo que su administración protege la naturaleza; auspicia la igualdad de género; repudia la discriminación, el racismo y el clasismo; fortalece valores morales, culturales y espirituales; cuida y se promueve el patrimonio cultural e histórico de México.
Asimismo, resaltó que ya no se roban el dinero y el presupuesto se destina para ayudar a “los de abajo”.
Al respecto, AMLO afirmó que al menos el 70 por ciento de los hogares del país reciben un Programa de Bienestar, por lo menos, o se beneficia de alguna forma con el erario público y sostuvo que no ha abandonado al 30 por ciento restante que tiene mejores condiciones económicas.