Con una inversión de 152 millones de pesos, el gobernador Jaime Rodríguez Calderón inauguró ayer el Parque Libertad.
Lo que hace poco más de un año era el Penal del Topo Chico, es hoy un espacio seguro de 10 hectáreas para la sana convivencia.
Tras cortar el listón inaugural, el mandatario estatal recorrió sus instalaciones, integradas en una primera etapa por 6 mil metros cuadrados de explanadas, 4 mil metros cuadrados de andadores, vitalista, ciclopista, cuatro parques de bolsillo, canchas deportivas y juegos.
Además de 50 mil metros cuadrados de áreas verdes y 700 árboles que mejorarán la calidad del aire en la zona, y la conservación de edificio icónico conocido como La Cruz, el cual estaba construido para 500 reos y albergó hasta 8 mil.
«La Cruz» será museo
En una segunda fase, este último se convertirá en un museo denominado «Vida y Terror».
«Aquí se vivió terror, miedo, angustia, por la indecisión de los gobernantes, a la mejor yo también puede patear el bote, pero no soy de los que patea, a mí me gusta batear», resaltó.
«Esto es un legado para Nuevo León… estoy más orgulloso de haber decidido tumbar el nido en donde se generaba la mayor parte de la delincuencia metropolitana, el parque va a crecer, los arboles van a ser frondosos».
«No debe regresar está ola de terror, está historia de terror que vivimos muchos años», puntualizó.
Un negocio para el crimen organizado
El extinto centro penitenciario, aseguró, representaba un negocio de 500 millones de pesos mensuales al crimen organizado.
Y si bien recibe constantes amenazas y todo tipo de advertencias, enfrentará las consecuencias.
Recordó que desde tiempos del gobernador Alfonso Martínez Domínguez ya se vivía un caos en el reclusorio; sin embargo, pasaron nueve gobiernos más y ninguno se atrevió a controlar el sistema penitenciario.
«Vinieron nuevos gobiernos, y controlar el sistema penitenciario, ninguno de ellos se atrevió».
«En febrero que vi los montones de gente fallecida, ahí tomé la decisión (de cerrar el penal), pero nos dejaron un gobierno desfondado, sin dinero, sin orden, con problemas en todos lados».
Aunque es administrado por el Patronato del Parque Fundidora, descartó que el ingreso al Parque vaya a tener un costo.
El gobernador descartó que en el lugar se encontrara un sistema de software con una base de datos para realizar extorsiones.
