Por Erika González Ehrlich
El análisis y la difusión de la verdad en Sin Línea Mx no ha sido un camino fácil, ni cómodo, ni gratuito. Desde su aparición en 2019 nuestro medio ha sufrido tres ataques severos con la intención de sacarnos del aire.
El primero sucedió después de que el medio de Aristegui nos incluyó en un análisis ligero elaborado por su amiga de SignaLab, señalándonos como granja de bots, acusando también a las cuentas individuales de nuestros colaboradores y mandándonos un ataque cibernético que terminó por desactivar nuestro sitio Web.
Entonces Sin Línea Mx era un medio pequeño en alcance y atacarnos resultaba relativamente sencillo para una estructura como la de ellos, conllevando consecuencias graves para nuestra permanencia. Nunca se nos brindó el derecho de réplica que Aristegui tanto defiende, para cuestionar con bases científicas el análisis mediocre en el que basaban sus conclusiones ridículas.
La segunda arremetida tuvo lugar después de evidenciar la verdad tergiversada de Latinus en un programa de Brozo, su analista circense. En esa ocasión el objeto del embate volvió a ser nuestro sitio Web, el cual recibió 5 mil ataques cibernéticos por minuto durante varios días, que venían dirigidos desde varios servidores en los Estados Unidos, teniendo que restablecer la página y que reforzarla con programas para desviar los ataques.
En ambas ocasiones pudimos lograr mantenernos vivos gracias al apoyo incondicional y generoso de nuestra audiencia, porque Sin Línea Mx hasta hoy es un esfuerzo colectivo de ciudadanos comunes y corrientes, que no ha tenido fines de comercialización o lucro.
Ayer Sin Línea Mx volvió a ser víctima de otro “profundo” análisis de Signa Lab difundido en Aristegui Noticias, realizado con la misma metodología de cocina que utilizaron para hacer el primero, sin rigor científico alguno, donde incluso señalan como bots a colaboradores de Sin Línea Mx, girando alrededor de las publicaciones del medio al que acusan de fuente de información falsa.
En esta ocasión, actuando en nado sincronizado con Twitter, nos mandaron bloquear la cuenta de Sin Línea Mx en esa plataforma. Pero atacar a Sin Línea Mx de 2022 no es lo mismo que atacarla en 2019. La enorme reacción manifestada por nuestros amigos, seguidores, suscriptores y simpatizantes en las redes, dio lugar a que nuestra reclamación en Twitter fuera atendida con celeridad y nos devolvieran la cuenta en unas cuantas horas.
Sin embargo, es fundamental señalar esta práctica recurrente, que busca silenciar a toda costa la crítica fundada, a través del ataque de estos medios que se disfrazan de periodistas o comunicadores, pero que en realidad se meten a la cama con la oligarquía para obtener privilegios financieros y que además cuentan con todas las herramientas que estos traficantes de influencias ponen a su servicio para facilitar sus ataques. Estos comunicadores privilegiados, suelen utilizar el principio de transposición de Joseph Goebbels, adjudicándole sus propios defectos y malas prácticas al otro.
La buena noticia en todo este lamentable teatro, es que personajes como Aristegui y Loret ya han salido del clóset, despojándose de sus máscaras. Por fortuna hoy ya sabemos quiénes son y a qué se dedican; la única diferencia que los distingue, es que una privilegia la hipocresía por encima del cinismo del otro, pero en lo demás son iguales.
Como dijo el expresidente estadounidense Ronald Reagan: “La historia nos enseña que la guerra comienza cuando la gente cree que el precio de la agresión es barato”.