Un grupo de más de 200 personas salió de la Central de Autobuses de Monterrey en busca de cruzar la frontera con Estados Unidos.
Aproximadamente 250 migrantes emprendieron su camino hacia el estado Coahuila, luego de que pasaran cuatro días en la Central de Autobuses de Monterrey, en Nuevo León, sin que se les permitiera avanzar a la frontera con Estados Unidos; informó MILENIO.
Durante la tarde del jueves, los migrantes se organizaron para continuar el camino, que tiene como destinos las ciudades de Piedras Negras, Acuña y Saltillo, en busca de cruzar la frontera con Estados Unidos.
Policías de Monterrey y elementos de Fuerza Civil custodian la caravana de migrantes.
Les prohíben la entrada a Coahuila
Tras una travesía durante casi dos meses por ocho países para alcanzar el sueño americano, unos 600 migrantes, principalmente venezolanos, que viajaban con destino a Ciudad Acuña, Coahuila, fueron dejados a su suerte en Monterrey, abarrotando la Central de Autobuses; señaló MILENIO.
Los migrantes quedaron varados luego de que el gobierno de Coahuila rechazó su ingreso y ni siquiera permitió que los migrantes se bajaran del autobús, por lo que prefirieron traerlos a la central más cercana y más grande, que es la de la capital de Nuevo León, pese a haber pagado su pasaje; por lo que algunos de ellos planeaban salir hoy en la madrugada caminando rumbo a aquel estado.
Los migrantes venezolanos provenientes de Maracaibo y Caracas, así como nicaragüenses, originarios de Managua, arribaron desde la noche del domingo en unos 15 autobuses de 40 pasajeros.
Sin explicación alguna fueron dejados en el inmueble ubicado sobre la avenida Colón y la calle Villagrán, pese a haber pagado su boleto de 2 mil 400 pesos desde la Ciudad de México hasta Ciudad Acuña.
INM prohíbe venta de pasajes en Central de Autobuses de Monterrey
La travesía que sortearon miles de migrantes provenientes de Venezuela, Nicaragua, Haití, entre otras, los dejó varados en la Central de Autobuses de Monterrey, luego de que el Instituto Nacional de Migración prohibió a las distintas líneas de transporte vender pasaje a extranjeros hacia las ciudades fronterizas.
Los extranjeros solicitaron el reembolso a las distintas líneas de transporte, aunque algunas no realizaron la devolución de su dinero, toda vez que las tarifas eran más altas que las habituales.
Algunos de los migrantes acudieron al módulo de Profeco en la Central de Autobuses, aunque éste no contaba con personal que atendiera las denuncias.
Imagen portada: Alexandra Amao | MILENIO
