Por Obed Campos
Hace nueve meses, a Hernán Villarreal Rodríguez nos lo quisieron vender, a los que no lo conocemos, como el experto, el super genio, vaya, la Lámpara de Aladino para solucionar el grave problema del transporte urbano que sufre Monterrey y su área metropolitana, pero…
En estos nueve meses de la administración estatal, tal parece que al secretario de Movilidad y Planeación Urbana solamente ha sufrido de una constante diarrea, por aquello de que… no ha dado una.
La de esta semana fue apoteósica, porque tuvieron que regresar la operación de la ruta y se desistieron de la requisa contra la empresa del camionero de abolengo Abelardo Martínez, ya que el operativo estuvo plagado de abusos de autoridad y eso, aquí y en China, pueden significar cárcel para la autoridad que los ejecute.
Por cierto, abusos de autoridad muy similares o justo por lo que se demandó al Bronco, Russildi, Longoria y demás ex funcionarios.
Encima, para “alivio de los males”, como diría mi mamá, estamos en serios problemas Batman, porque se esfumó la idea de que el transporte en Nuevo León fuera rescatado trayendo a operar aquí a empresarios de otros estados, como se anunció con bombo y platillo.
Nadie lo informó, pero se declaró desierta esta misma semana la convocatoria nacional de licitación para los empresarios interesados en la reestructuración del transporte.
En cristiano no hubo ni un solo interesado, ni de aquí de Nuevo León ni del resto del país, porque en estos términos planteados por la actual administración nadie quiere entrarle a dar el servicio en la entidad.
Hernán Villarreal Rodríguez anunció hace días que se iba a ofrecer como novedad “el pago por kilómetro”, pero por lo visto a ningún transportista mexicano le interesa el esquema, por lo que a la administración estatal no le quedará de otra más que ofrecer el temido subsidio.
Y es que en números llanos, apenas son 30 camiones chinos y muy fallidos, los que andan ahí a duras penas más 144 de rutas exprés a 15 pesos que difícilmente se darán abasto.
Como parche, las huestes de Villarreal Rodríguez ya enviaron una nueva convocatoria, que, sin ser brujo ni tener una bola de cristal es fácil de adivinar: no va a funcionar…
Pero que al cabo es Juan Pueblo el perjudicado porque Hernán y su familia se trasladan en Suburbans blindadas, con chofer y escolta.
Ellos no conocen, porque nunca lo han necesitado, un camión urbano por dentro y sin clima en estas temporadas.