El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, colocó en la cancha del Congreso, en especial de la mayoría republicana en la Cámara de Representantes, la pelota de la lucha contra el fentanilo procedente de México, con una petición presupuestal de 345 millones de dólares en equipo de detección y nuevas tecnologías para la detención en drogas sintéticas en la frontera sur; informó MILENIO.
El secretario de Seguridad Nacional (DHS, por sus siglas en inglés), Alejandro Mayorkas, anunció que la petición total de la dependencia con 252 mil empleados será de 60 mil millones de dólares para el año fiscal 2024 que inicia en octubre.
“Este presupuesto invierte en programas que nos protegen contra la amenaza del terrorismo aquí y en el extranjero, fortalecen la seguridad de nuestras fronteras, garantizan la respuesta rápida y la recuperación de los desastres naturales, y mucho más”, indicó.
En materia de seguridad fronteriza, la petición de la Casa Blanca propone invertir 535 millones de dólares en la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza (CBP, por sus siglas en inglés) para tecnología de punta, incluidos 305 millones en Sistemas de Inspección No Intrusiva, configurados especialmente en la detección de fentanilo en los puertos de entrada desde México.
El presupuesto también asigna 40 millones de dólares para combatir el contrabando de personas y las operaciones de drogas ilícitas, en particular la producción y distribución de fentanilo a través del Repositorio para Análisis en un Escenario Virtualizado (Raven), a fin de apoyar a las equipos especiales de investigación a bloquear y desmantelar las organizaciones criminales extranjeras.
Así, en la suma de Sistemas de Inspección No Intrusiva y del Raven, da una cantidad de 345 millones de dólares.
El sistema Raven proporciona herramientas y servicios analíticos especializados para grandes volúmenes de datos utilizando técnicas analíticas innovadoras para respaldar las investigaciones criminales de ICE y CBP.
De ser aprobado por el legislativo, luego de un proceso de intensas negociaciones a lo largo de los próximos meses, la petición presupuestal de la Casa Blanca contempla 113 millones de dólares para contratar 350 agentes de la Patrulla Fronteriza, 150 de Aduanas y Protección Fronteriza, 460 posiciones de procesamiento adicionales en CBP e ICE y 39 puestos para fortalecer el Programa de Transporte y Deportación.
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