Por Francisco Tijerina Elguezabal
Los funcionarios son como los libros de una biblioteca: los situados en los lugares más altos son los más inútiles. //Paul Masson
Dudo sinceramente que las iluminadas mentes del municipio de Monterrey que manejan el desarrollo urbano se detengan a pensar en los perjuicios que causan a la ciudadanía con las torpes e inútiles decisiones que toman.
Con esa moda de lo “políticamente correcto” hacen ahora “corredores verdes”, pero no se detienen a pensar en dónde hacerlos y la manera en que sus determinaciones impactan en la vida de los regiomontanos.
Así, ahora se les pudo hacer uno de estos corredores en la calle de Modesto Arreola, desde Héroes del 47 y hasta Juárez, aunque la verdad la mitad de la obra ya está hecha de Escobedo a Juárez con las banquetas ampliadas.
Ocurre que por esa vía existen casas de poco frente y por ello se permite el que los vecinos estacionen sus vehículos en ambas aceras, dejando para la circulación únicamente un carril.
Pues bien, ahora van a ampliar las banquetas, poner árboles y toda su parafernalia, lo que implicará quitarle un carril a la calle, lo que significará que los abnegados vecinos tendrán que irse a buscar a ver dónde ponen sus vehículos.
Lo más grave es que la mayoría de esas casas las habitan personas mayores de edad, a las que les van a arruinar la vida, con mucha banqueta, pero también con grandes molestias.
Hace un par de días me tocó padecer un viacrucis para salir de un atorón vial en la avenida Fundidora, poco antes de tomar el puente de Revolución, cuando dos tráilers chocaron por alcance y obstruyeron la mayor parte de los dos únicos carriles; ahí confluyen cuatro carriles que se convierten en dos y si no hubiese sido porque quedó un pequeño espacio entre ambos vehículos pesados, hubiésemos pasado más horas entrampados.
Cuando a la ciudad le urge movilidad y sobre todo opciones para circular en el eje oriente-poniente, los genios de Desarrollo Urbano del municipio le quitan carriles a una calle.
Mira que hay que ser listo para hacer estas cosas, pero no, ellos no piensan en el ciudadano, pero tampoco lo hacen en el verde y mejorar el ambiente, porque en el fondo está el pingüe negocio de algunos haciendo banquetas y poniendo arbolitos.
