La paraestatal pidió a la población hacer uso racional de la luz y de los climas ante la ola de calor que afecta a NL y a siete estados de la República.
Luego de que la plataforma MILENIO-MULTIMEDIOS informó que la ola de calor que enfrenta el país ya generó afectaciones en ocho estados: Nuevo León, Coahuila, Tamaulipas, Tabasco, Campeche, Querétaro, Veracruz y Yucatán, al sufrir apagones, la Comisión Federal de Electricidad (CFE) hizo un llamado a la población a ahorrar energía; señaló MILENIO.
Mediante un comunicado, la CFE dijo que el aire acondicionado es de los aparatos que más consumen energía eléctrica en el hogar, pues consideró importante cerciorarse de que su operación sea óptimo y no abusivo.
La CFE recomendó ajustarlo a 25 grados, pues por cada grado menos de temperatura, su consumo de energía aumenta entre 4 y 6%.
“Si las habitaciones con aire acondicionado no tienen aislamiento térmico correcto, el aparato trabaja con ineficiencia: por ejemplo, quizá se tenga que ajustar a 20 grados para alcanzar una temperatura real de 25 grados.
“Si se aprovecha el calor para secar la ropa al aire libre (cuando las condiciones climáticas lo permitan) se ahorra el consumo eléctrico de la secadora”, indicó.
La CFE dijo que es aconsejable sustituir las bombillas tradicionales por lámparas LED, que pueden ahorrar más del 80% de energía eléctrica durante todo su tiempo de funcionamiento (comparados con bombillas incandescentes) y su vida útil podría ser de más de 10 mil horas.
“Siempre que sea posible se debe aprovechar la iluminación natural. Se recomienda colocar los espacios de trabajo y estudio en espacios donde entre la luz del sol. Se sugiere forjar el hábito de apagar las luces y desconectar los aparatos que no se estén utilizando.
“Es importante regular la temperatura del refrigerador de acuerdo a las instrucciones del fabricante (por cada grado más de frío, el consumo de energía aumenta un 5%)”, manifestó el órgano.
Los equipos de refrigeración, añadió, deben ubicarse a la mayor distancia posible de fuentes de calor como estufas, hornos o ventanas; ya que su cercanía ocasiona una mayor demanda de energía.
“Hacer un uso consciente y cuidadoso de la energía eléctrica no solo puede ahorrar dinero, sino que ayuda a reducir nuestro gasto energético como sociedad y, por lo tanto, nuestro impacto en el cuidado del medio ambiente”, concluyó.
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