Una junta militar tomó el poder en Gabón y declararon que habían depuesto al presidente Ali Bongo unos minutos después de que el organismo electoral del país centroafricano anunciara que había ganado un tercer periodo presidencial.
Los hechos ocurrieron la madrugada del miércoles 30 de agosto cuando un grupo de militares retuvo al presidente en arresto domiciliario, de igual forma, el grupo militar que se autodenominó como Comité por la Transición y la Restauración detuvo al hijo del presidente, Noureddin Bongo, y otras seis personas que formaban parte del gabinete presidencial y el partido.
La primera acción que tomaron los militares fue la suspensión de las instituciones del Estado, el cierre de las fronteras hasta nuevo aviso, la disolución del Senado, la Asamblea Nacional, el Tribunal Constitucional, el Consejo Económico, Social y Ambiental, etc.
Aunado a esto, declararon la anulación de los resultados de las últimas elecciones celebradas el pasado 26 en donde Bongo logró por tercera ocasión la victoria en la votación presidencial con el 64.27% de los votos.
Los amotinados gaboneses consideran que el proceso electoral no fue transparente, además, los observadores y la oposición denunciaron una serie de irregularidades en las elecciones.
Cabe recordar que en 2009 Ali Bongo sucedió a su padre Omar Bongo quien a su vez fue presidente de Gabón desde 1967, es decir, el gobernante que más se mantuvo en el cargo en África.
Los ciudadanos de Gabón reaccionaron celebrando el levantamiento de los militares, que a su vez abrieron las conexiones de internet y restablecieron las emisiones de medios internacionales tras estar bloqueadas por las autoridades desde el día de las elecciones.
Gabón es el segundo país proveedor más importante a nivel mundial de manganeso, un metal que cada vez toma más protagonismo en la fabricación de baterías de vehículos eléctricos.
Imagen portada: SPR Informa
