Grindr perdió a alrededor del 45 por ciento de sus trabajadores luego de exigirles regresar al trabajo presencial, debido a que la mayoría de ellos vive lejos de la oficina ubicada en Hollywood, California; reportó MILENIO.
Los empleados, recientemente afiliados al sindicato Trabajadores de las Comunicaciones de América (CWA por sus siglas en inglés), hicieron pública su decisión en un comunicado en el que denunciaron que «se les obligó a reubicarse en la ciudad o ser despedidos».
Al menos 80 personas, de las 178 que la aplicación de citas tenía contratadas, mostraron su inconformidad con la nueva política que los obligaba a trabajar dos días a la semana de forma presencial.
El grupo de disidentes acusó a la app, enfocada en la comunidad LGBT, de «tratar de silenciarlos respecto a sus condiciones laborales», en el comunicado.
La empresa minimiza el movimiento
El CEO de Grindr, George Arison, sostuvo que la renuncia beneficiará a la compañía debido a que reducirá costos, en un discurso pronunciado frente a inversionistas desde San Francisco.
«El equipo será más pequeño que antes y así es como lo queremos. Porque obviamente impactará de forma positiva a corto plazo. Pero también creo que muestra que ustedes pueden aprovechar esto como un negocio, ya que no se necesita un equipo grande para lograr nuestros objetivos», consideró de acuerdo a Los Angeles Times.
Cabe recordar que Grindr no es la única empresa digital que experimenta este tipo de cambios, ya que personal de AT&T (telefonía), ProPública (agencia de noticias) y Google (buscador de internet) también emitieron un posicionamiento similar en la CWA.
Las empresas buscan «regresar a la normalidad previa a la pandemia», por esa razón convocan a sus trabajadores a acudir uno o dos días a la semana al trabajo presencial; informó MILENIO.