Por José Jaime Ruiz
Ante el naufragio posible, el golpe de timón. La candidata del Frente Amplio, Xóchitl Gálvez, avanza hacia el precipicio y sus promotores hacen muy poco por salvarla. Al contrario, abandonar el Titanic de Xóchitl parece prioridad en Alejandro Alito Moreno, Marko Cortés y hasta Germán Martínez, quien declinó ser su vocero, su “boxcero” y su “Vox/cero”. La demolición de la candidatura de Xóchitl no es externa, es interna, la implosión fue por obra y desgracia de la propia Gálvez.
La encuesta de DeLasHerasDemotecnia difundida en redes sociales es la puntilla a una campaña mediocre, insulsa y políticamente jodida de la candidata del gerente de la oligarquía, Claudio X. González. En su 18 Brumario, Carlos Marx aseguró: “Hegel dice en alguna parte que todos los grandes hechos y personajes de la historia universal aparecen, como si dijéramos, dos veces. Pero se olvidó de agregar: una vez como tragedia y la otra como farsa”.
Para nuestro país fue una tragedia que Vicente Fox llegara a Los Pinos, Fox traicionó a los mexicanos y propició la llegada de Felipe Calderón, quien profundizó la tragedia ensangrentando a México. Xóchitl Gálvez es la segunda vez, es decir, la farsa que quiere ser humorística. Su Brumario es un “Bromario”, como proyecto de nación, donde las líneas discursivas son sustancialmente sandeces, leperadas. No sólo farsa, la campaña de Xóchitl es un fiasco, si el Frente Amplio no la releva, lo suyo será el desastre.
La encuesta DeLasHerasDemotecnia desnuda la propuesta del conservadurismo; radiografía o TAC, el diagnóstico es el declive, la decadencia. Sheinbaum supera ampliamente a Xóchitl en el nivel de conocimiento (68% contra 47%), la opinión negativa de la candidata del Frente Amplio es dramática, ronda el 50 por ciento (47%) y, lo peor, en intención de voto sólo alcanza el mediocre 14 por ciento, frente al abrumador 68 por ciento de Claudia. La encuesta es fúnebre para Xóchitl Gálvez.
Los gritos de auxilio se escuchan desde las organizaciones supuestamente civiles del Frente Amplio. Como lo hace Emilio Álvarez Icaza desde las redes sociales: “Hacemos un respetuoso llamado a dejar atrás agravios, descalificaciones, divisiones y cálculos políticos. Convocamos a que construir la mayor unidad de la oposición, social y política; sumarse y fortalecer la candidatura de @XochitlGalvez, para evitar la consolidación del presidencialismo autoritario”. Un grito desesperado, una súplica a Movimiento Ciudadano.
Xóchitl Gálvez está a la deriva. Descarrilar el Plan C de Andrés López Obrador y Claudia Sheinbaum, donde Morena obtenga mayoría calificada en 2024, cada vez está más lejos y se desvanece cada vez más. Xóchitl no descarrilará el Plan C donde se democratice el Poder Judicial. Beatriz Paredes será una mejor candidata que Xóchitl, pero tampoco garantiza descarrilar la mayoría calificada para Morena. La derecha, el conservadurismo, la oligarquía y sus propuestas entraron en crisis. Y frente a este Titanic, Claudia Sheinbaum… viento en popa.
