Por Francisco Tijerina Elguezabal
Como a Dulce Sarahí, aquella que se hizo famosa por su frase de “yo no choqué, me chocaron”, al alcalde de San Pedro, Miguel Treviño, no se bajó de la contienda para el 2024, a él “lo bajaron”.
El anuncio del edil hecho a través de una entrevista no viene sino a confirmar lo que todos sabíamos, que difícilmente Treviño tendría cabida en las boletas electorales.
¿Quién lo bajó?
Aunque Treviño quiere defender la honra diciendo que quiere dedicar tiempo a la familia y que su trabajo como alcalde requiere de su dedicación al cien por ciento, lo más probable es que el Gobernador Samuel García o un mensajero de su parte le avisó a Miguel que no está contemplado para ser candidato a la Senaduría por Movimiento Ciudadano como el deseaba.
La otra posibilidad es que el aún presidente municipal sampetrino haya analizado con seriedad las encuestas y sondeos y se haya dado cuenta de que no goza de las simpatías necesarias para ganar una elección.
De ser cierta la última hipótesis, resulta extraño el que Treviño le pegue “el beso de Judas” a Vivianne Clariond, la regidora que supuestamente buscará la candidatura independiente para sucederlo en el cargo, diciendo que “apoyará el proyecto independiente de la continuidad”.
Aquí surge una pregunta: ¿de verdad Treviño apoyará a la hija del Benjas o de plano está trabajando para otra candidata ciudadana que presuntamente se pintará de color najanja?
