Por Francisco Tijerina Elguezabal
“Las cifras no mienten, pero los mentirosos también usan cifras”
Anónimo
No me faltan ganas de reír a carcajada abierta, pero los hechos son tan indignantes que la sonrisa que comenzaba a dibujarse en mi rostro se transforma en una mueca de rabia, impotencia y coraje al ver la desfachatez con la que la administración del alcalde Luis Donaldo Colosio intenta vernos la cara de estúpidos a los regiomontanos.
Hay que anotar para los anales de historia la megahazaña de haber secado la mayor parte de los árboles de la Alameda “Mariano Escobedo” y muchísimos parques en la ciudad, logro nunca antes conseguido a pesar de sequías iguales o peores en la Sultana del Norte.
Y ahora, con bombo y platillos, confeti, serpentinas y fanfarrias, la Secretaria de Desarrollo Urbano Sostenible (Seduso), Brenda Sánchez Castro, inicia los trabajos de “rescate” de nuestra Alameda plantando ¡20 árboles!, sí, leyó usted bien, ¡20 árboles!
Y aquí uno tiene que detenerse para preguntar si a estos árboles si los van a cuidar o sucederá como la inmensa mayoría de los que han colocado bajo el metro que se han convertido en ramas secas.
A la funcionaria se le hace bolas el engrudo o no se sabe explicar; primero dice que piensan plantar 115 árboles en la Alameda, pero minutos después triplica la cantidad al afirmar que el año entrante pretenden sembrar 10 mil, de los cuales alrededor de 320 se ubicarán en la Alameda.
No es por ser desconfiados, pero habría que indagar cuánto exactamente nos cuestan a los regiomontanos cada arbolito de esos y cómo se desarrolló el proceso de adquisición… digo, en 20 no creo que sea mucho, pero ya en 10 mil sí hace bonche.
Por eso cuando manejas cifras es necesario construir un mensaje sólido y contundente, que no deje espacio a dudas y confusiones, pero si se les secan los árboles, ¿cómo pensar en que puedan manejar cifras?
