Por José Jaime Ruiz
Alejandro Alito Moreno, se sabe, no da brinco sin depósito, sin maleta. ¿Cuánto le costó a Francisco Cienfuegos y Adrián de la Garza manipular, de nuevo, los cargos de elección popular del PRI y algunos del PAN? Alito ungió a Paco como coordinador de las campañas federales en Nuevo León (incluyendo la de Xóchitl Gálvez): “Nuestro presidente @alitomorenoc designó a @pacocienfuegos como Coordinador de las Campañas Federales en el Estado de Nuevo León… Estamos seguros de que, con su experiencia y capacidad, obtendremos grandes resultados”.
El boletín del PRI carece de memoria, Samuel Alejandro García Sepúlveda le dio una zarandeada a Adrián de la Garza y Paco Cienfuegos fue vapuleado por Luis Donaldo Colosio Riojas en Monterrey. ¿Esa es la “experiencia y capacidad”? Lo único cierto es que el PRIAN, con su ujier Zeferino Salgado, se maneja no como un instituto de interés público sino como un instituto de intereses privados.
Para tener la bendición de Alito hay que apolingar, como lo denunció la diputada priista Montserrat Arcos. Informa Proceso: “La extitular del Organismo Nacional de Mujeres Priistas incluyó en su demanda a Hugo Eduardo Gutiérrez Arroyo, secretario de Finanzas del Revolucionario Institucional, ‘y quienes resulten responsables’ de un caso que inició como ‘un asunto de explotación y, por qué no decirlo, de moches y corrupción, del cual me quisieron hacer parte y yo me negué’.
“En conferencia de prensa, la legisladora relató que Gutiérrez Arroyo le propuso un esquema mediante el cual devolvería la mitad de los fondos destinados a capacitación y empoderamiento político de las mujeres, con el fin de obtener unos 32 millones de pesos”.
Los millones nunca le serán ajenos a Alito. Trascendió que en el botín de las candidaturas llevará mano Adrián de la Garza para la alcaldía de Monterrey, Karina Barrón para el Senado y, obvio, Paco Cienfuegos obtendrá una plurinominal para una diputación federal (Paco le pica los ojos hasta a sus cuates). Estos tres personajes, para quienes no lo recuerdan, participaron en los audios revelados por Layda Sansores donde los implican en millonarios “apoyos” para propaganda y entrevistas a modo.
En el agandalle también existe otro agandalle, el de Paco Cienfuegos que, como siempre, dejará tirados a sus “cercanos” y él amarrará el fuero que requiere contra las investigaciones de la Unidad de Inteligencia Financiera federal y la Fiscalía General de la República. En la extinción del PRIAN, ¡sálvese quien pueda!… o quien pague la impunidad a Alito.
