La Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE) manifestó que es necesario que México pueda implementar estrategias que garanticen una gestión sostenible del agua pata poder aprovechar las oportunidades que presenta el fenómeno económico del nearshoring; informó MILENIO.
De acuerdo con su último Estudio Económico de México 2024, la organización detalló que una eficiente administración del agua no sólo salvaguardaría los limitados recursos hídricos del país, sino que también mejoraría la confiabilidad del suministro de agua para las empresas, reduciendo los riesgos y costos operativos.
“Debería ser un elemento clave de la estrategia de adaptación al cambio climático de México y, al promover la sostenibilidad ambiental y el cumplimiento de los estándares internacionales, haría de México un destino aún más atractivo para la relocalización de empresas”, refirió.
Detalló que en las últimas décadas, la cantidad de agua disponible para cada persona disminuyó drásticamente debido al cambio climático y el crecimiento demográfico y México tiene una de las proporciones más bajas de población conectada a plantas públicas de tratamiento de aguas residuales en la OCDE.
Manifestó que un desafío clave para una mejor gestión del agua es mejorar la precisión y disponibilidad de datos actualizados sobre los recursos, el uso y la calidad del agua.
Además de fortalecer la gobernanza del agua, “ya que las responsabilidades están muy fragmentadas, lo que dificulta la coordinación de políticas y la rendición de cuentas”.
“Existe un mandato de la Corte Suprema para emitir una Ley General de Aguas para agosto de 2024, lo que es una oportunidad para mejorar la gobernanza y las regulaciones del agua, por ejemplo otorgando a la Comisión Nacional del Agua (Conagua) un papel de rectoría más fuerte en el sector”, señaló la OCDE.
Destacó que la metodología para fijar las tarifas del agua no es pareja ya que se decide a nivel municipal, y carece de transparencia, por lo que los precios no reflejan el costo del suministro de agua, siendo cubierta la diferencia a través de subsidios del gobierno federal.
También resaltó la necesidad en México de invertir en infraestructura de suministro de agua y saneamiento para reducir las fugas, ya que actualmente alrededor de 46 por ciento de este líquido se pierde debido a fugas y mejorar el tratamiento y la distribución del agua.
De acuerdo con el Instituto Mexicano para la Competitividad (IMCO), la actual crisis hídrica está afectando a un total de mil 613 municipios con sequías severas, extremas y excepcionales, equivalente a 61.5 por ciento del territorio nacional.
Señaló que el incremento en las sequías es un reflejo de que el cambio climático ya impacta al país.
“La transformación en los patrones de precipitaciones es una realidad, al igual que el aumento de las temperaturas; como muestra, México registró un incremento de la temperatura promedio de 1.6 °C en los últimos 40 años”, comentó el instituto.
Explicó que la disponibilidad promedio de agua por persona en México disminuyó de forma constante en las últimas décadas, producto del crecimiento demográfico, la mala gestión y el aumento en la producción agropecuaria, entre otros factores.
Detalló que en 1960 la disponibilidad ascendía a 10 mil metros cúbicos, mientras que para el año 2000 se redujo a 4 mil metros cúbicos.
En la actualidad se encuentra en 3.2 mil metros cúbicos y de continuar la tendencia, se estima que para 2030 se ubique por debajo de 3 mil metros cúbicos, a medida que aumenta la población, las sequías y la sobreexplotación.
Imagen portada: Especial | MILENIO