El trasvase que desde el pasado mes de enero se realiza de la presa El Cuchillo a la presa La Boca le ha inyectado algo de vida al embalse del municipio de Santiago; informa MILENIO.
Aunque el nivel del agua se ha incrementado sustancialmente, el panorama aún parece un tanto desolador.
El bajo nivel dista mucho todavía de lo que podía observarse hace dos años.
«Sí. No, pues como estaba muy seco pues no había mucho movimiento aquí, porque viene gente de Monterrey, pero ya la gente mejor se pasaba para la Cola de Caballo. Aquí no se metían pues no había agua. Lo principal es el agua y no había, pues estaba muy… Ya hasta los negocios estaban casi por quebrar», dijo Norberto Gaytán Salazar, de 62 años, nacido y habitante de El Cercado.
A pesar de todo, en las orillas de La Boca, en pleno martes, puede verse a una que otra persona caminando, o intentando pescar.
Xi Chaohui, un ciudadano chino, de 49 años, con tan sólo unas semanas habitando en la región, logró pescar tres ejemplares en las escasas aguas de La Boca.
Es la primera vez que va, y dijo que de mantenerse con agua y peces regresará al embalse.
«Esta es la primera vez que vengo aquí. Hoy varios colegas vinieron antes a pescar, así que vine hoy para divertirme un poco. (…) Hay muchas carpas. Entre ellas dejé caer una y pesqué tres», comentó el oriental.
El malecón, construido durante la pasada administración estatal, aún está lejos del líquido.
Sobre la llanura que quedó a causa de la sequía, algunas embarcaciones se encuentran varadas.
Al 5 de marzo, los niveles de las presas en Nuevo León son los siguientes:
- La Boca 33.25 % – 13.12 Mm3
- Presa Cerro Prieto 9.63 % – 28.87 Mm3
- Presa El Cuchillo: 40.67 % – 456.74 Mm3
El Cuchillo y Cerro Prieto registraron una ligera disminución con respecto al lunes 4 de marzo, salvo la presa en Santiago, que tuvo un incremento de poco más del 1 por ciento, pero eso se debió a la «inyección» realizada desde China, Nuevo León, y no necesariamente a los escurrimientos naturales.
El trasvase se lleva a cabo en forma gradual desde los primeros días de enero, a través del nuevo acueducto El Cuchillo II, que transporta el vital líquido hasta la planta potabilizadora de San Roque, y de allí al embalse de Santiago.
Aunque, de acuerdo con la CNA, el pasado mes de febrero registró precipitaciones un tanto superiores a su promedio histórico, el agua acumulada no significó una acumulación relevante para las presas de Nuevo León.
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