Con su nuevo disco, ‘Fantasía’, la cantante colombiana busca «abrir una reflexión en torno a la diferencia entre lo real y lo ficticio»; conoce cuándo lo presenta en la Ciudad de México.
En ese entonces no tenía miles de fans ni era conocida como Pedrina, sino con su nombre de pila: Edna Lorena Arcila Rodríguez. Tenía 6 o 7 años e iba a un colegio de monjas, y por su cabeza no pasaba el Festival Estéreo Picnic o el South by Southwest; informó MILENIO.
Era una niña, «la más pequeña del grupo», que en clase de música tuvo un primer acercamiento con un instrumento que hasta el día de hoy la hace pensar que «quizás no había suficientes»: las congas.
Estas percusiones, dice la cantante colombiana a MILENIO, «eran demasiado altas para mí, ni siquiera alcanzaba a ver la parte superior». Pero igual se entretenía al tocarlas, «y repetir el patrón que me enseñaba el profesor». Así comenzó su historia musical; una historia de goces, sacrificios y, sobre todo, fantasías.
¿Qué es lo que te motivó a elegir la música como forma de vida?
«La música como forma de vida no es fácil, a veces es más lo que te desmotiva que lo que te motiva, pero cuando uno está hecho para algo, por más que intente hacer lo contrario tarde o temprano se dará cuenta de su verdadero propósito. Por ejemplo: una cuchara podrá intentar ser cuchillo y logrará cortar algunos alimentos, si se esfuerza incluso cortará algunos muy difíciles, pero en algún punto se dará cuenta de que estaba hecha para otro propósito en el que fluye de manera más natural y sin esfuerzo».
Partiendo de lo anterior, ¿cuál es el mayor sacrificio que has hecho por tu carrera?
«Hacer música de manera independiente implica reinvertir constantemente en tu carrera en todos los aspectos, incluyendo el económico. Además del trabajo musical en sí, debes encargarte de muchas tareas adicionales, convirtiéndolo en un compromiso de tiempo completo. A menudo, este esfuerzo no se traduce directamente en una remuneración económica proporcional al trabajo y terminas dejándote en último lugar con tal de impulsar tu carrera».
Este 2024, la artista, que cimentó su talentosa voz recorriendo proyectos como Hotel Mama y Pedrina y Río, lanzó Fantasía, disco que con sus 23 temas busca «abrir una reflexión en torno a la diferencia entre lo real y lo ficticio».
La nacida en octubre de 1987 en Bogotá explica que en el mundo actual, al ser «principalmente digital», damos mucha importancia a lo que vemos a través de las pantallas, por lo que «muchas veces olvidándonos del aquí y el ahora».
«Quiero abrir preguntas alrededor de nuestra salud mental y toma decisiones con base a lo que creemos ‘objetivo'», sentencia sobre la esencia de su álbum que implica unos 40 minutos de escucha.
En estos tiempos de algoritmos y la aparición de sencillos cada semana, lanzar un disco es un poco ir a contracorriente.
«Sí, por eso decidí convertir mi álbum en un programa de radio. Quería que la experiencia no se limitara a escuchar las canciones de forma aleatoria, sino que fuera un verdadero viaje a través de una estación de radio ficticia, con invitados, anuncios comerciales e incluso la interacción de un oyente. Todo esto con el objetivo de sumergir al oyente en un mundo de fantasía, donde puede descubrir pistas sobre mi infancia, sentir nostalgia y reflexionar sobre el futuro. Cada track del álbum revela el concepto que inspiró Fantasía. Esta fue mi manera de ‘obligar’ a la gente a descubrir mi álbum en este formato y a escuchar todas las canciones en el orden planeado«.
¿Qué ventajas o desventajas encuentras en el uso de las redes sociales para tu proyecto?
«Realmente solo le veo ventajas, es la única forma que tenemos los artistas independientes de llegar a nuestro público sin inversiones que nos cuesten un ojo de la cara. El precio que hay que pagar es trabajar muchísimo más, crear contenido es un trabajo de mucho esfuerzo y aunque no siempre te guste, tienes que jugar el juego para no quedarte por fuera».
Desde el año pasado, el auge del reguetón y los corridos a nivel global ha propiciado que portales y comunicadores musicales afirmen que se vive ‘El momento de la música latina‘, pero la creativa tiene dudas al respecto porque «vengo oyendo esta teoría desde hace más de 10 años».
Reconoce que siempre ha habido un interés por la música latina, pero la atención de la última década se ha focalizado en lo urbano, «y no veo muy claro cómo esto puede representar un coletazo positivo para la música alternativa latina».
«La música latina es tan diversa y su evolución es tan rica en formas de expresión que es muy difícil saber si el éxito de las grandes figuras del mainstream realmente puede beneficiar el crecimiento de los artistas latinos emergentes», externa.
¿Cuál es tu gran meta musical?
«Quiero pararme sobre una gran tarima, crear un show impresionante y ver que miles de personas vinieron a cantar conmigo mis canciones».
México, ¿qué tan importante ha sido en tu carrera?
«Es tan importante que me vine a vivir con mi familia; vine a perseguir el sueño mexicano y no tengo la menor duda de que este lugar tiene todos los ingredientes que necesito para explotar todo mi potencial».
Pedrina cierra la charla con MILENIO contando que la llegada Paz, su hija, la «ha hecho ir más allá de mis objetivos, ella me hace sentir invencible porque ser mamá es una tarea monumental, y al ver que puedo no solo ser mamá, sino una gran mamá, pues eso me hace entender que puedo hacer todo lo que me propongo».
«Quiero que ella crezca en un ambiente diverso, lleno de posibilidades, y el arte es el mejor ambiente para construir una mente flexible«.
Conciertos de Pedrina en México:
La cantante colombiana se presentará en la Ciudad de México el próximo sábado 25 de mayo, específicamente en el Foro del Tejedor (avenida Álvaro Obregón #86, colonia Roma Norte) con un costo de 250 pesos; publicó MILENIO.
Imagen Portada: MILENIO.