Por José Jaime Ruiz
Latinus y Carlos Loret de Mola son las caras más visibles de la irremediable crisis del Cártel del Chayote. Latinus está quebrado y su situación financiera se refleja en el despido o baja de salario de sus empleados que ya se quejaron ante la Secretaría del Trabajo. Roberto Madrazo y sus patrocinadores –tal vez algunos a través del lavado de dinero– apostaron todas sus cartas en contra del presidente Andrés Manuel López Obrador, la presidenta electa Claudia Sheinbaum y contra el Segundo Piso de la Cuarta Transformación… perdieron. Brazo mediático de la DEA, la CIA y la derecha internacional, a través de Atlas Network, gastaron su pólvora en infiernitos, como las etiquetas de “narco” en contra de Sheinbaum y López Obrador.
Los reyes del montaje y la manipulación acosaron y persiguieron a notables personajes de la 4T (Rocío Nahle) o familiares del presidente, sin documentar sus denuncias, lo suyo fue la bajeza, la calumnia. Los acosadores-perseguidores se victimizan ahora como perseguidos, invento de chirriones y de palitos. Latinus, Loret de Mola y ese adefesio misógino enmascarado en Brozo, Víctor Trujillo, perdieron. No son los únicos.
El Cártel del Chayote entró en crisis. Por su discriminada apertura en la campaña electoral, Azucena Uresti es la menos golpeada. No así los otros. La 4T anuló el cochupo y los manipuladores de la información se recostaron en el chayote internacional y en las migajas ofrecidas por Claudio X. González. Se gastaron el dinero y no hay más, a menos de que se obtenga del lavado, del narcoperiodismo o del DEA/periodismo (Tim Golden y Anabel Hernández). La crisis del Cártel del Chayote es una cancha pareja donde igual “sufre” Enrique Krauze y Letras libres como Héctor Aguilar Camín y nexos.
El ejemplo mayor es el de Raymundo Riva Palacio, quien siguiendo a Krauze, endiosa el periodismo de manipulación y de montajes de Loret de Mola (para Riva Palacio y Krauze, Loret es un Julio Scherer renacido y el Latinus el Proceso de antaño). La verdad del 2 de junio fue tan relevante que convierte en irrelevantes las opiniones y maromas de los chayoteros. El Cártel del Chayote es una mafia en extinción porque su trabajo de manipulación ya no es redituable ni para la DEA ni para la CIA ni para la derecha internacional ni para Claudio X. González ni para el extinto PRIAN.
Latinus es la cara visible de la derrota mediática de la oligarquía. Su crisis financiera, como la mierda que es, flotó antes que la de los otros medios de manipulación. TV Azteca y Ricardo Salinas Pliego, por sus problemas locales y en los Estados Unidos, son los siguientes. Los medios o se reinventan o perecen. Los medios se olvidan de la manipulación y ofrecen credibilidad o se extinguen. El golpeteo de Latinus y Loret de Mola en contra de López Obrador, funcionarios de la 4T y familiares siempre fue un chantaje para seguir enriqueciéndose a través de la venta de medicamentos al gobierno (IMSS, ISSSTE y otras dependencias). Nunca fue el periodismo, siempre fue el negocio farmacéutico. Y el enriquecimiento inmoral y, probablemente, ilícito de Carlos Loret de Mola lo demuestra.