Por Obed Campos
Hipocresía
Morir de sed bebiendo tanta agua/ Morir de amor fingiendo estar alegre/ Queriendo amar y estar indiferente… // Los Pasteles Verdes
Hace días cierta columna política, que a veces raya en “calumnia política” aventó “un borrego”: Que Samuel regresó de sus vacaciones super enchilado por la derrota electoral de Mariana y que iba a cortar cabezas empezando por la de Gerardo Palacios Pámanes, secretario de Seguridad, quien, dicen, no se prestó a andar haciendo maniobras electorales.
El fin de semana pasado, a agua pasada tras el embate de la tormenta “Alberto”. alguien volvió a lanzar ese borrego aderezado con que Aldo Fasci lo iba a suplir en el cargo este lunes, o sea ayer.
Hay una mano negra que quiere hacer quedar mal al gobernador Samuel García destituyendo del cargo a Gerardo Palacios Pámanes.
¿Quién es la persona que trata de hacer quedar como un ogro al Gobernador?
Se lo digo por lo siguiente:
El pasado 26 de Marzo las Bancadas del PRI-AN en el Congreso del Estado pidieron la renuncia de Gerardo Palacios Pámanes por la falta de resultados, aunque a diario se ven más y más detenidos delincuentes y criminales vinculados a los diversos cárteles que hay, no solo Nuevo León sino en todo el país.
Si Samuel remueve a Pámanes caerá en la trampa del PRI-AN y éstos aprovecharán políticamente ese botín político, más ahora que se espera un nuevo conflicto entre el Legislativo y el Ejecutivo y buscarán colocar un jefe policíaco a modo… Va usted a ver.
Pero lo peor, insistimos, ¿quién es el personaje o personaje que quiere que Samuel García haga el ridículo ante la sociedad? ¿Sus enemigos o en verdad hay fuego amigo naranja en casa?
La cantidad de telefonemas y mensajes de Whatsapp preguntando si el rumor era cierto y los enemigos del régimen, quienes hasta publicaron el rumor habla de un complot en grande.
Por cierto, y no ha de ser casualidad, que ninguno de esos amigos ha pedido la renuncia de Juan Ignacio Barragán que, con sus pifias en Agua y Drenaje no solo hace quedar mal a samuel, sino que tiene a la mitad del área metropolitana muriéndose de sed.
De la incompetencia de Barragán ya me he ocupado en muchas entregas, pero se necesitaba una calamidad como esta para que quedara exhibido como lo que es: un ignorante en el tema de las aguas, grandes y chicas.
Y es que ahora sí, como en la canción de Los Pasteles Verdes, ¿los regios vamos a morir de sed teniendo tanta agua?
