Noticias en Monterrey

Buscar
Cerrar este cuadro de búsqueda.

Por Félix Cortés Camarillo

El autor de la frase es Hegel, aunque Marx la popularizó en un ensayo en Die Revolution, y el tema es el mismo, el 18 Brumario en Francia, cuando Napoleón Bonaparte pone fin al ciclo de la Revolución iniciada en 1789 y enmarcada en el 1793 con el fin del Ancièn Regime y la muerte en el cadalso de Luis XVI, todavía rey. La sentencia dice que la historia acontece dos veces, una como tragedia y la otra como farsa. Los ilustres personajes de la historia regresan, pero como bufones.

Nos enseñaron que la toma de la Bastilla -de donde se liberaron siete presos- marca el inicio y el fin de la Revolucion Francesa. En realidad, esta parte de la historia, la trágica, se iba a dar más tarde, luego de que las diferentes asambleas constituyentes fueron definiendo clases y partidos políticos, llamados estados por los historiadores, y las fuerzas políticas se partían en dos, los girondinos, nobles nostálgicos, y los jacobinos, burgueses emergentes. Minoría que incluía a los Sans Culottes  -literalmente sin calzones- encabezada por Maximilien Robespierre, quien se hizo llamar El Incorruptible, por si le suena familiar. Pues el buen Max se escabechó a unos diez mil “adversarios” con toda la barba, dicho en homenaje a Monsieur Guillette, el inventor del artefacto que cortó la cabeza a Luis XVI y al mismo Maximilien, además del rastrillo de afeitar. El período de 1792-93 se conoce en Francia como el terror.

Con todo este desmadre tuvo que llegar Bonaparte a poner orden en la alacena: acabó con todo, estableció el cargo de Cónsul en el que mandaba era él, y acabó coronándose emperador. Y todo comenzo en el 18 brumario, segudo mes del calendario que la Revolucion Francesa había inventado y que equivale a nuestro 9 de noviembre. Tiempo de brumas.

Si pelados tan picudos como Hegel y Marx dicen que la historia se repite dos veces, yo digo que esa señora tiene delirio tautológico. Los aztecas le llamaban el regreso de los soles, por llamar de alguna manera a los años. El problema es que el papel de bufón cada vez es menos preferido.

PARA LA MAÑANERA, porque no me dejan entrar sin tapabocas: Yo estoy convencido de que en algún lugar, debajo de alguna piedra o alcantarilla, hay priístas decentes. Dijo López Dóriga ayer en la tele que doscientos cincuenta mil miembros del PRI, decentes y sobre todo, militantes de su partido, exigían la renuncia de su líder Alito Moreno. A cambio de ello, el dirigente pide una reelección por otro año más. Este güey piensa que dentro de ocho años seguirá existiendo su partido.

felixcortescama@gmail.com

Fuente:

Vía / Autor:

// Félix Cortés Camarillo

Etiquetas:

Compartir:

Autor: stafflostubos
Ver Más