Ante el aumento de la inflación, los consumidores han optado por comprar sus productos básicos en tiendas de abarrotes, lo que ha ocasionado que sus ventas crezcan 0.4 por ciento de un año a otro, según el Grupo Bit By Teamcore; reportó MILENIO.
En contraste, los minimercados y mayoristas presentaron una variación negativa de 6.2 por ciento y 6.3 por ciento, respectivamente, durante el mismo periodo mencionado.
En su último informe sobre el comportamiento de los canales «tradicional» y «moderno», destacando el cambio de hábitos de los consumidores, la empresa señaló que en México hay más de 1.05 millones de tienditas de abarrotes, las cuales representan el 15.65 por ciento del total de los micronegocios que atienden el 52 por ciento de la demanda nacional, aportando así el uno por ciento al Producto Interno Bruto (PIB).
El informe señala que esto se debe a la cercanía con la comunidad, la atención personalizada y la capacidad para responder rápidamente a las necesidades cambiantes de los consumidores.
Según datos de la Alianza Nacional de Pequeños Comerciantes (Anpec), estos establecimientos son responsables de al menos el 31.2 por ciento de las ventas de empresas de consumo en categorías como alimentos y bebidas.
Sin embargo, factores como la inflación, la seguridad y la omnicanalidad han ralentizado el crecimiento de estos establecimientos en los últimos años.
“Es importante destacar la labor de los fabricantes y distribuidores en la estabilización de las tiendas de abarrotes. Aumentar la frecuencia de visitas por parte de los distribuidores y ajustar los portafolios a la realidad del canal son contribuciones significativas de los fabricantes para mantener la estabilidad de este sector».
«Las tiendas de abarrotes se defienden, se transforman y se adaptan a las necesidades de los compradores, pero necesitan apoyo para entender mejor el mercado», señala el informe.
Entre los datos presentados también destaca que las promociones o descuentos hacia las tiendas por parte de los productores y distribuidores llegan a su punto más bajo en la historia. En contraste, la compra o facturación de las tiendas hacia sus distribuidores aumentó en un 2.3 por ciento en valor frente a 2023.
Las categorías de productos que más se adquieren en estos establecimientos corresponden a la categoría de aseo, como shampoo y desodorante, salsas y algunos productos de confitería.
Imagen portada: Especial / MILENIO