Por Carlos Díaz Barriga
Hoy le quedan 20 días. Hoy se votará la reforma judicial en el Senado; si no les alcanza el día, en la madrugada por venir. Hoy es día de ejercer todo el poder. A cualquier costo. El Presidente trae puesto ese traje. Da igual el color.
Se presentará en la ‘mañanera’ el anunciado informe que exhiba los excesos y arbitrariedades del Poder Judicial; antes, decide ejercer “mi trabajo de orientar… porque mucha gente no tiene claro, por culpa nuestra”. Y pone un video de la televisión noventera, con Héctor Suárez.
La trama, un Ministerio Público que recibe regalos de un ratero y luego desecha al ciudadano robado que viene a poner la denuncia y ve que el M.P. trae su cadena y su reloj. Tras cuatro minutos, cuando termina el sketch, Andrés Manuel López Obrador dice “no, pero no es ése… hay otro más”. Risas. Se lo ponen. Mismo personaje. Temática similar. Nadie previene al Presidente de que el ejemplo alude a un M.P., que depende de las fiscalías o sea, del Poder Ejecutivo. No es un juez. Tema que le han señalado en los últimos meses ‘¿y la reforma a las fiscalías, cuándo?, porque ahí es donde no se integran bien los expedientes y donde se pudre de inicio el proceso. Humor involuntario.
Lo liga al informe denunciante a cargo de la Secretaria de Gobernación, Luisa María Alcalde, y de quien será su relevo, Rosa Icela Rodríguez. El Presidente acude a la sesión de preguntas discreto, sin ostentar el poderío. Sin mofa a las multitudinarias marchas de los estudiantes de derecho o de académicos o de trabajadores del Poder Judicial. Simplemente, se las cumplió cuando hace unos días les dijo: “están en su derecho… pero no pasa nada”. Incluso les abre una rendija, la rendija de la ilusión: “(si) ganan los corruptos en el Senado, ya cumplimos nosotros, aunque, toco madera”. Sabe que no va a pasar. Ejerce sin arrogancia. Con extraña elegancia.
Le da la palabra a la conocida youtubera -entre el público 4T- Elianet Valadez, que pone sobre la mesa el tema del mal estado de las carreteras federales en el Estado de México y el de que los paisanos en el extranjero no puedan tramitar su pensión en los consulados. Después, un ‘comunicador independiente’ con trámites y encarguitos de alguien interesado en resolver algo personal.
Sobre el reciente narco-enfrentamiento en Culiacán, “no quiero adelantar nada… espero que sea transitorio… ya hay protección de la Guardia Nacional y de las Fuerzas Armadas” ¿Está vinculado con el tema del ‘Mayo’ Zambada? “Sí, es muy posible… pero hasta el mismo señor Zambada escribió de que no era conveniente la violencia”.
La del estribo: ¿Presidente, ¿le da la bienvenida a Yunes a Morena? “No estoy enterado de eso” ¿Pero justamente usted denunció a esta familia, cómo…? “No, es que no sé yo lo que está pasando, no sé sobre eso. Yo presenté una iniciativa”.
De ahí, al Colegio Militar. Visita de los Presidentes a las Fuerzas Armadas. Ceremonia militar. Solemne. Claudia Sheinbaum lee -ante 22 mil elementos- discurso perfectamente bien cuidado, escrito y dicho. Forma y fondo. Parece el de su toma de posesión: “van a seguir siendo los tiempos de las hazañas pacíficas… nunca emitiré una orden que vulnere el orden constitucional o los derechos humanos de nuestro pueblo… díganle a sus madres, particularmente a sus madres, que dice la Presidenta electa que tienen hijos e hijas grandiosos, que harán cosas extraordinarias, porque estamos viviendo tiempos virtuosos”.
El Presidente agradece al General Sandoval y al Almirante Ojeda: “fueron mis dos brazos”. Saludó diciendo que participaba “acompañando a la Presidenta electa”. Él está a la derecha de ella. Por primera vez.
@diazbarriga1