En entrevista para MILENIO el vicepresidente de la comisión laboral de Confederación Patronal de la República Mexicana (Coparmex), Juan Carlos de la Vega aseguró que a más de dos años de la implementación de los mecanismos laborales que se encuentran en el T-MEC, las empresas mexicanas enfrentan diversos retos que han expuesto la asimetría de estos proceso; informó MILENIO.
En el marco de su participación en el foro «El dinamismo actual en el trabajo”, mencionó que uno de los principales puntos de preocupación para los empleadores, es la falta de reciprocidad en la presentación del mecanismo laboral de respuesta rápida.
“La verdad es que primero debería de ser un mecanismo simétrico, aunque actualmente es asimétrico, ya que México no puede presentar quejas como lo hace Estados Unidos en contra de nuestro país”, señaló.
Se busca seguridad jurídica
Expuso, que para que este mecanismo laboral del T-MEC sea simétrico, este proceso deberá pasar por una instancia mexicana para que se generen reglas específicas en el Tratado para la seguridad jurídica de las empresas.
Además, destacó que este ejercicio se encuentra lleno de vacíos que pueden vulnerar una defensa justa, debido a que «las empresas que reciben un procedimiento de este tipo, en principio, nunca les es notificada la copia de la queja».
De acuerdo con de la Vega, tampoco se les da acceso adecuado a las pruebas presentadas, y «en ocasiones circulan o se agregan a las quejas grabaciones o videos que no están circunscritos dentro de un contexto específico», lo que aumenta la inseguridad jurídica de las empresas que reciben un proceso mediante el T-MEC.
Otro aspecto que genera incertidumbre en las empresas, es sobre la falta de conocimiento para presentar su defensa frente a las acusaciones de empleados, por lo que este mecanismo se ha utilizado principalmente como «una arma de litigio entre sindicatos y empresas».
«Se ha vuelto ya un tema de quién puede más, quién puede menos, que ha distorsionado su finalidad original de ayudar a los trabajadores a elegir libremente a sus representantes sindicales”, expresó.
El vicepresidente de la comisión laboral también advirtió que un aspecto que inquieta a las empresas es sobre cómo Estados Unidos usa este mecanismo para intervenir en temas que son de competencia de los tribunales mexicanos, lo cual se ha convertido en «una invasión de la autonomía y de la soberanía mexicana».
Imagen portada: MILENIO