Por José Jaime Ruiz
“Mucho cuidado con el tono, chula, recomendaría don Lázaro. No se trata precisamente de una personalidad sensata”. La “Rayuela” del periódico La Jornada tuvo sus más altos momentos con Carlos Payán. La que transcribo supura misoginia y también desprecio. No sólo es desafortunada, también indica ninguneo a la presidenta constitucional de los Estados Unidos Mexicanos, Claudia Sheinbaum Pardo, a su investidura: ¿Sheinbaum “shula”? El juego fonético agrede.
Si no la escribió Carmen Lira, la directora del medio, al menos la avaló, imprimatum est. Es tiempo de mujeres, pero no de insidia de mujeres. Decir “chula” es despectivo, machista. Arrebato emocional: “Mucho cuidado con el tono, chula, porque calladita te ves más bonita”. Aderezar la primera frase con la insensatez de Donald Trump no justifica la violencia verbal contra la presidenta.
“En el Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra las Mujeres, reafirmamos el compromiso de reforzar acciones para que todas las mujeres y niñas tengan todos sus derechos”, señaló Sheinbaum Pardo el 25 de noviembre pasado. No hay que buscarle tres pies al gato, tiene cuatro. No se trata del derecho a la libertad de expresión que tiene Carmen Lira sino el uso de La Jornada para atacar a Sheinbaum. ¿Libertad de expresión o libertad de extorsión?
Lo que no suena lógico suena metálico. ¿Le recortó el Gobierno federal la pauta a La Jornada? ¿El periódico ya no tendría el alto subsidio que le proporcionó el gobierno del presidente Andrés Manuel López Obrador? ¿De dónde viene el enojo de Carmen Lira contra Claudia Sheinbaum? Especular nunca sirve, una investigación de la publicidad gubernamental al medio arrojaría luz acerca de la insidia. Lo que no suena lógico de un medio afín a la 4T… suena metálico.