Durante los primeros nueve meses de 2024 se encontraron en promedio 2.6 tomas clandestinas de hidrocarburos en Nuevo León, para marcar un nivel sin precedentes; informó MILENIO.
De acuerdo a información de Pemex vía Transparencia difundida por el Clúster Energético, al cierre de septiembre de 2024 el número de tomas ilegales en territorio neolonés sumó 603, para pulverizar cualquier récord.
En todo el año anterior (2023) el número de esos delitos se ubicó en 532, que ya de por sí era un nivel histórico.
El Clúster Energético señaló que en total de esos delitos detectados en los primeros 3 años de la administración del gobernador Samuel García Sepúlveda equivalen al 44.2% del total registrados en la entidad desde el año 2000, y además marcan todo un récord para la primera mitad de un sexenio.
Por municipios, se tiene que 15 de los 51 que integran el estado reportan “piquetes” a las instalaciones de Pemex durante los primeros 9 meses del año, lo que representó la disminución de una localidad respecto al 2023 al no registrar Hualahuises delitos de esa índole.
Destacan 5 municipios del estado dentro del nada grato delito de tomas clandestinas que son: Cadereyta, General Bravo, Santa Catarina, Mina y Montemorelos con 58.8% del total entre los años 2,000 hasta septiembre pasado.
El común denominador, indica el análisis realizado por el Clúster Energético es que por esas localidades hay instalaciones de Pemex o pasan ductos que transportan hidrocarburos, lo que eleva su atractivo para la delincuencia.
Sin embargo, el reporte refiere que los vecinos de Nuevo León no se salvaron del “azote” de la delincuencia, ya que presentaron de enero a septiembre de este 2024, 454 tomas ilegales en Coahuila, nivel sin precedente y en Tamaulipas 938 en ese periodo, que de seguir la tendencia estaría muy cerca de batir el récord de mil 301 perforaciones detectadas en el 2018.
Huachicol al alza
De acuerdo con un análisis realizado por PetroIntelligence, el contrabando de combustibles representa aproximadamente el 24% del total.
Es decir, de los 168 millones de litros vendidos diariamente en el país, 40.3 millones provienen de actividades ilícitas.
De hecho, el Servicio de Administración Tributaria (SAT) estima que, entre 2018 y 2021, el contrabando de combustibles aumentó un 122%, pasando de 7 mil 281 millones de litros vendidos a 16 mil 216 millones de litros anuales. Este volumen representó en 2021 cerca del 29.47% de las ventas legítimas de combustibles.
Según la Comisión Reguladora de Energía (CRE), el porcentaje de pérdidas por huachicol es del 3.41%, lo que equivale a 2 mil 087 millones de litros.
Y para Pemex, la sustracción de combustible provocó una pérdida de 20 mil 168 millones de pesos para las finanzas de la paraestatal.
Imagen portada: Archivo / MILENIO
