Siempre que termina la temporada regular de la NFL, llega un día temido por muchos gerentes generales y entrenadores. El Black Monday, o Lunes Negro, es el día en el que la guillotina cae y ruedan las cabezas de aquellos responsables porque un equipo no cumplió las expectativas puestas a inicios de temporada o sufrieron descalabros tan sorprendentes, que la relación laboral y el proyecto ya no lucen sostenibles; reporta MILENIO.
Las noticias que más resuenan son aquellas que involucran a los entrenadores en jefe, pero no todos los equipos se esperan a esta fecha para darle las gracias a los head coaches. Los New York Jets hicieron eco en el futbol americano profesional cuando se anunció la salida de Robert Saleh tras un 2-3 en el inicio de campaña y la polémica ante la aparente presión de Aaron Rodgers para deshacerse de él; Dennis Allen, quien tuvo un inicio de 2-0 con los New Orleans Saints, cayó en una mala racha y fue despedido tras un 2-7; Matt Eberflus rompió una racha en los Chicago Bears, quienes le dieron las gracias después de perder en Día de Acción de Gracias y tener marca de 4-8 en el proceso.
Jerod Mayo había sido el último en ser cesado antes de llegar el Black Monday, tras no cumplir con las expectativas en los New England Patriots ante su falta de experiencia y dejar al equipo con marca de 4-13. Su caso fue bastante polémico, ya que llegó al cargo más por su estrecha amistad con el dueño Robert Kraft que por estar preparado, al punto de que fue el sucesor de Bill Belichick sin necesidad de someterse a una entrevista, lo que sí sucederá para esta siguiente etapa.
De cara a la semana de playoffs con la ronda de comodines, hay diferentes movimientos de escritorio que se podrían realizar en los equipos ya eliminados, con la esperanza de armar el rompecabezas idóneo que les permita llegar a ese grupo de contendientes.
Las Vegas Raiders
El futuro de Antonio Pierce todavía no se define, pero hay indicios de que el dueño Mark Davis podría darle una oportunidad al tener el vestidor de su lado, ya que jugadores como Brock Bowers y Aidan O’Connell lo apoyan. Hasta que no haya una reunión con Davis y Tom Telesco, el gerente general, todo parece indicar que Pierce va por un segundo año.
New England Patriots
En estos momentos, todo parece indicar que el vicepresidente ejecutivo de personal de jugadores Eliot Wolf seguirá en la organización y que los Pats están interesados en traer a un viejo conocido. Mike Vrabel fue linebacker de Nueva Inglaterra entre 2001 y 2008 y formó parte de la primera mitad de la dinastía, al ganar los tres primeros anillos; aunque su salida en 2009 fue en parte por fricciones con el dueño, la relación mejoró bastante desde entonces y es un sólido candidato para volver a NE, con seis años de experiencia al frente de unos competitivos Tennessee Titans que fueron primeros sembrados en 2021.
Otra opción que contemplan es Ben Johnson, coordinador ofensivo que ha ayudado a Detroit para volverlo uno de los ataques más explosivos de la NFL. Brian Flores es otro candidato que ha resonado, conocido de Kraft y tiene a los Minnesota Vikings con una de las mejores defensivas de la Liga.
Indianápolis Colts
Los Potros se perderán los playoffs por cuarto año consecutivo, pero tanto el coach Shane Steichen como el gerente general Chris Ballard conservarán sus puestos para la siguiente campaña. No corrió con la misma suerte el coordinador defensivo Gus Bradley, responsable de que Indy fuera la cuarta peor defensiva en yardas permitidas (361.2), la séptima peor contra el pase (229.4), novena peor contra la tierra (131.8) y la novena que más puntos admitió (25.1).
Jacksonville Jaguars
La tensa relación entre Doug Pederson y los Jags terminó con el despido del primero como head coach. Pederson, quien ganó el Super Bowl LII con Philadelphia Eagles, perdió el vestidor al culpar de forma directa a sus jugadores por los malos resultados y terminar con récord de 4-13 que los dejó sin playoffs por segundo año al hilo.
Lo que sí hicieron fue conservar a su gerente general Trent Baalke, quien se sentará con el dueño Shahid Khan para delimitar el proyecto de la próxima temporada y tratar de que Trevor Lawrence dé ese salto de calidad que tanto se le ha esperado desde su reclutamiento como el primer pick del Draft de 2021.
New York Jets
Tras el posible último partido de Aaron Rodgers en Nueva York –algunos consideran que incluso en la NFL– hay un ambiente de alivio en la Gran Manzana, ya que los dos años con el mariscal de campo veterano resultaron decepcionantes e incluso su permanencia desató rumores como la posible fuga de talentos jóvenes, incluido el receptor de tercer año Garrett Wilson. Matt Nagy (coordinador ofensivo de Kansas City Chiefs), Bobby Slowik (coordinador ofensivo de Houston Texans), Joe Brady (coordinador ofensivo de Buffalo Bills), Arthur Smith (asistente en Tennessee Titans), Aaron Glenn (coordinador defensivo de Detroit Lions) y Rex Ryan (con quien llegaron a playoffs por última vez) están entre sus posibles candidatos.
Mike Borgonzi, gerente general asistente en Kansas City Chiefs, así como Alec Halaby, gerente general asistente en Philadelphia Eagles, también son pretendidos por los Jets para ser el nuevo gerente general del equipo.
New York Giants
El dueño y presidente John Mara decidió darle una última oportunidad a la dupla de Brian Daboll (entrenador en jefe) y Joe Schoen (gerente general) para tratar de revertir la mala situación que viven los G-Men desde 2016, el primer año sin Tom Coughlin en la institución.
Es probable que Mara haya querido cambiar su costumbre de impaciencia ante los head coaches, ya que desde entonces han pasado Ben McAdoo, Steve Spagnuolo (interino), Pat Shurmur y Joe Judge y realmente el único que les ha dado mejores resultados en Daboll, quien se quedó sin su mejor hombre en Saquon Barkley (hoy en Filadelfia) y que lidió con el fracaso de Daniel Jones como quarterback titular.
Sin embargo, nada garantiza que sigan más de un año si no se ve un viaje de playoffs para la próxima campaña.
Chicago Bears
Tras el despido de Eberflus y un interinato de Thomas Brown, Chicago muestra interés en solicitar entrevistas con Aaron Glenn (coordinador defensivo de Detroit Lions), Ben Johnson (coordinador ofensivo de Detroit) y Anthony Weaver (coordinador defensivo de Miami Dolphins).
Cincinnati Bengals
Uno de los casos más comentados es el de este equipo con potencial de contendiente, pero que lleva dos años consecutivos sin postemporada. Zac Taylor seguirá en el cargo, pero los que pagaron los platos rotos fueron el coordinador defensivo Lou Anarumo, el entrenador de línea defensiva Marion Hobby, el entrenador de linebackers James Bettcher y el entrenador de línea ofensiva Frank Pollack.
Los posibles argumentos del despido de los tres primeros se deben al desempeño defensivo, ya que Cincinnati tuvo la octava peor defensa en yardas totales (348.3), la número 12 más floja contra el pase (223.5), la decimocuarta que más yardas terrestres permitió (124.8) y la séptima a la que más puntos le anotaron (25.5).
El tema de la protección a Joe Burrow ha sido un tema de gran preocupación en los Bengals y no han encontrado la solución. El departamento entrenado hasta hace poco por Pollack permitió 48 capturas, la undécima cantidad más alta de la Liga. Además, no fueron capaces de generar espacios para los corredores, con el tercer registro más bajo por tierra, con 92.6 yardas por encuentro.
Pese a que Cincinnati tuvo una temporada de éxitos individuales (Joe Burrow fue líder en yardas y touchdowns por aire, Ja’Marr Chase tuvo la triple corona de recepciones y Trey Hendrickson lideró a la NFL en capturas), el triunfo colectivo no se vio reflejado y los Bengals querrán revertir la situación mientras todavía cuenten con un núcleo joven. Taylor ha sido criticado en su coacheo, por lo que no se sabe qué tanto seguirá en el cargo si los Bengals no resurgen como lo hicieron en 2021 y 2022.
Seattle Seahawks
Ryan Grubb dejó de ser su coordinador ofensivo tras un rendimiento irregular de los alados, que fueron la ofensiva número 18 en puntos anotados (22.1), la cuarta que menos corrió (22.5 acarreos por partido) y la quinta que menos yardas consiguió por tierra (95.7).
New Orleans Saints
Los Santos han fijado su mirada en el coordinador ofensivo Kellen Moore, quien ayudó a los Eagles a recuperarse del bache del año pasado y ser la octava mejor ofensiva total (367.2), aunque no fue sorprendente por tierra (187.9, el cuarto registro más bajo) se debió en gran parte al enfoque terrestre, que fue el segundo mejor de la NFL con 179.3 yardas por partido, ayudó a Saquon Barkley a una temporada de 2,000 yardas y fueron la séptima que más puntos anotó (27.2).
Imagen portada: La Afición / MILENIO
