La Presidenta Claudia Sheinbaum planteó como uno de los 100 puntos prioritarios de su Gobierno la construcción de un millón de viviendas dignas y de bajo costo durante su sexenio, parte de ellas a través de los cambios que traerá la reforma constitucional al Instituto del Fondo Nacional de la Vivienda para los Trabajadores (Infonavit), cuyos objetivos son los siguientes:
- Créditos baratos y suficientes para derechohabientes que ganan menos de dos salarios mínimos.
- Desarrollo de vivienda para comprar terrenos y/o vivienda.
- Arrendamiento social con opción a compra: Es decir que el trabajador podrá rentar sin exceder el pago de 30% de su salario para que tenga acceso a una vivienda adecuada.
El titular del Infonavit, Octavio Romero Oropeza, ha explicado que lo anterior se logrará a través de la constructora propia de la institución, con la que se busca reducir los tiempos y costos de producción de viviendas, mismas que estarán ubicadas en centros de desarrollo urbano y contarán con todos los servicios; señala SPR.
De acuerdo con Romero Oropeza, esta serie de mejoras en el Infonavit tiene como propósito dar marcha atrás a las políticas del periodo neoliberal, pues el funcionario ha expuesto casos de corrupción e irregularidades ocurridas en materia de vivienda durante los gobiernos anteriores al sexenio del expresidente Andrés Manuel López Obrador, iniciado en 2018.
El titular del Infonavit, además, ha señalado que durante dicho periodo se construyeron “cientos de miles” de viviendas alejadas de los centros de trabajo, escuelas y clínicas, sin acceso a servicios básicos, “caras y malhechas”.
Romero destacó que, aunado a los sobrecostos, entre 1987 y 2018, los créditos subían año con año, a pesar de que los derechohabientes pagaran. La situación se hizo insostenible: según datos oficiales de la cartera del Infonavit, de los 6.2 millones de créditos existentes, 4 millones son impagables. Asimismo, estas medidas han provocado que, actualmente, 7.3 millones de derechohabientes no puedan adquirir una vivienda que se ajuste a sus necesidades económicas.
Por otro lado, la corrupción fue otro obstáculo para que la ciudadanía pudiera contar con una vivienda digna. Por ejemplo, en 2014, durante el gobierno del expresidente Enrique Peña Nieto, el Infonavit pagó 100 millones de pesos a la empresa “Telra” para diseñar y operar una plataforma de desarrollo inmobiliario, para lo que se le dio un plazo de dos años. Sin embargo, la empresa jamás realizó la plataforma e incluso fue indemnizada por el Infonavit.
Por su parte, Romero ya ha emprendido acciones para lograr la eliminación de los “créditos impagables”, pues el 11 de noviembre de 2024 anunció el congelamiento del saldo y las mensualidades de 2 millones de créditos que entran en el esquema de Veces Salarios Mínimos (VSM), otorgados antes del 2013.
Imagen portada: SPR
