Un Linkin Park renovado en elementos, pero conservando su misma esencia, fue el que regresó a Monterrey tras una marcada ausencia de los escenarios regios; publica MILENIO.
Se trató de la primera presentación de Emily Armstrong en la Sultana del Norte, en donde demostró su potente voz, tal y como Chester Bennington lo hacía en sus mejores momentos.
“From Zero World Tour” es el nombre del espectáculo que llegó al Estadio de los Borregos del Tec, mismo que inició minutos después de haber puesto “El Corrido de Monterrey” en el sonido en voz de Vicente Fernández.
Las luces se apagaron, un láser en color blanco en el centro anunciaba que el concierto estaba a punto de comenzar, y así fue.
En punto de las 21:10 horas, uno a uno de los integrantes apareció, el público se volcó en ovaciones y fue así como comenzó la noche con “Somewhere I Belong”, al final de la canción Mike Shinoda agradeció en español.
Comenzaba el concierto y los recuerdos llegaron rápido, pues los presentes de cierta manera homenajearon a Chester al corear “Crawling”, dejando a Emily cantar solo algunas partes y es que esta es una de las canciones representativas de la agrupación que sonó fuerte a principio de los 2000’s.
“New Divide” sería el tercer tema, y posteriormente Mike y Emily se acercarían más a sus fans, pues recorrieron la pasarela que los llevó casi al centro de la cancha del estadio y ahí pusieron a rockear a todos con “The Emptiness Machine”, dando así por terminado el primer set musical, pues el concierto estuvo dividió en 5 actos.
El escenario armado en su mayoría por mega pantallas se encendió con unos gráficos abstractos, al tiempo que la música comenzaba a sonar y los sólidos de los presentes daban la bienvenida total a “Creation” esta vez dejando un poco aún lado el rock y sintiendo más los tintes electrónicos, fusión que distinguió siempre a Linkin Park.
El público verdaderamente estuvo entregado, pues canción que comenzaba, canción que se ovacionó, Emily, por su parte, se mostró muy tranquila al estar frente al que se dice ser el público más difícil del país.
“Burn it down”, “Over each other” completaron el segundo acto, de hecho en esta última canción, la hoy vocalista de Linkin Park tomó su guitarra mientras que en las pantallas se enfocaba a cada uno de los integrantes de la banda, pero con efectos especiales, haciendo que la experiencia fuera aún mejor.
La pasarela se volvió a Iluminar, llegó el momento de que Mike diera una cátedra de su rap al tiempo que Emily le contestaría potentemente al ritmo de rock, esto fue en “Two Faced”, cabe señalar que una fanática arrojó un sostén, mismo que Armstong se puso sobre su ropa, provocando la euforia de los fans que no dejaron de cantar y al final de la canción en una sola voz coreaban “Linkin Park, Linkin Park”.
Imagen portada: Luis Guerra / MILENIO