La maquinaria de cooperación entre los vecinos se reactivó con la llegada a la Presidencia de los Estados Unidos de Donald Trump. El deterioro con el anterior gobierno de Joe Biden se dio por la captura sin respuesta oficial de Ismael el Mayo Zambada, ya antes el presidente Andrés Manuel López Obrador había tensado las relaciones cuando les puso un alto a las actividades de la narcoDEA en México. No se traslada a 29 criminales como una respuesta distónica sino como un cálculo político, si de cabeza fría se trata y de llevar el control cooperativo en una relación bilateral. La reacción espontánea no es el método del gobierno de la presidenta Claudia Sheinbaum Pardo. La entrega de los generadores de violencia fue un evento bien meditado.
El tributo de Trump a Sheinbaum sobre políticos corruptos que se beneficiaron con el trasiego de drogas tiene nombre: Felipe Calderón Hinojosa. Otra más, Norma Piña, por ser cómplice de generar violencia y proteger a los narcos para que ejerzan su criminalidad en diferentes territorios del país y desde las cárceles mexicanas (como los hermanos Zetas). El Cártel de la Toga facilita el traslado de fentanilo hacia el norte. Calderón Hinojosa propició un narcogobierno de la mano o bajo las órdenes de Genaro García Luna, la ex embajadora de los Estados Unidos en México, Roberta Jacobson, dio cuenta de esta perversa relación, también el expresidente francés, Nicolas Sarkozy.
El reciente activismo digital de Calderón Hinojosa no es gratuito. En una reciente entrevista con Ben Domenech, el presidente Trump aseguró que pedirá cuentas a los políticos mexicanos corruptos. “¿Incluyendo a políticos principales mexicanos?”, insistió el entrevistador. “Ciertamente, yo recomendaría que se investigaran. Ciertamente, va a depender de Pam Bondi (la fiscal general de Estados Unidos) que es excelente en lo que hace”.
¿Quién defenderá al presidente espurio del “haiga sido como haiga sido”? El expresidente autoexiliado en España no es un adversario de la 4T, por sus afrentas, es su enemigo Número Uno, por encima del padre de la desigualdad moderna, Carlos Salinas de Gortari, o del empleadillo de la oligarquía nativa y trasnacional, Ernesto Zedillo. El cerco va, el círculo se cierra: Genaro García Luna preso, los 29 entregados y el 30, Calderón Hinojosa, en la lista de espera: es la hora de Felipe.
(José Jaime Ruiz: Escritor, poeta y periodista, es autor de los libros La cicatriz del naipe (Premio Nacional de Poesía “Ramón López Velarde”), Manual del imperfecto político, Caldo de buitre y El mensaje de los cuervos. Es director fundador de la revista cultural PD. y de Posdata Editores. Dirige el periódico digital www.lostubos.com.)
