El Gobierno de Nicaragua anunció este 28 de febrero su decisión de salir de la Comisión de Derechos Humanos de la Organización de Naciones Unidas (ONU), luego de la publicación de un informe de dicho organismo, cuyo contenido asegura que el ejército nicaragüense reprimió a civiles durante las protestas de 2018, en las que fallecieron más de 300 personas, bajo las presuntas órdenes del presidente Daniel Ortega, quien se mantiene en el poder desde el año 2007; publica SPR.
El ministro de Relaciones Exteriores de Nicaragua, Valdrack Jaentschke, envió una carta al Consejo, en donde acusó al organismo de violar su propia normativa de imparcialidad. “instrumentalizan los Derechos Humanos, usándolos como pretexto para injerir en los asuntos internos de los Estados”, afirmó Jaenstschke.
Estos hechos ocurren en medio de otra polémica, pues, el pasado 27 de febrero, Daniel Ortega y su esposa Rosario Murillo encabezaron un evento en el que 30 mil civiles encapuchados juramentaron para conformar una nueva “policía voluntaria”, que estará bajo las órdenes de la pareja presidencial.
Cabe destacar que no es casual nombrar a Ortega y Murillo en conjunto, pues el presidente ha decidido conferirle a su esposa el cargo de copresidenta. Aunado a esto, el pasado 19 febrero entró en vigor una reforma constitucional que elimina la división de poderes en Nicaragua, concentrando el poder en estas dos figuras políticas.
Imagen portada: SPR
