Por José Jaime Ruiz
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@ruizjosejaime
La mayor prueba del fracaso de Manuel de la O Cavazos, secretario de Salud del Gobierno de Nuevo León, es la negativa hecha públicamente por el gobernador electo, Samuel Alejandro García Sepúlveda, de que continúe en su cargo. Si la credibilidad de la administración del gobernador constitucional, Jaime Rodríguez Calderón, estaba en entredicho, el pésimo manejo de la pandemia hecho por De la O, la sepultó.
Manuel nunca entendió la sociedad de servicios en que se convirtió el área metropolitana de Monterrey, presencial y en redes sociales. Sin una buena y segura movilidad, este tipo de sociedad se trastoca. Hasta ahora la movilidad presencial, enfáticamente el transporte público, ha sido un desastre y un foco de infección. Sin poder resolver el problema, De la O lo trasladó a otros espacios, como son los restaurantes, y a los lugares de esparcimiento, ya no hay que sorprenderse, al aire público.
Un pediatra toma decisiones autoritarias, patriarcales, moralistas. Como a los niños, le dice a los ciudadanos: “Es por tu bien”. Y no es así. Nunca hubo científicos manejando científicamente y no política o ignorantemente la batalla contra el Covid-19. Un pediatra descalificó las opiniones de médicos especialistas y epidemiólogos. Como si fuera un asunto de pensamiento mágico, despreció el uso de la Ivermectina, sólo por dar un ejemplo.
Contradictorio hasta el delirio, el pediatra se supuso pedagogo y todólogo. Mientras cerraba restaurantes en San Pedro, se hacía de la vista gorda de masivos en la Arena Monterrey. El corolario de su estulticia, fue clausurar el Colegio Americano, escuela que cumple estrictamente con los protocolos sanitarios. Con ello, Manuel se echó encima a la clase económica, política y mediática de San Pedro.
Los sospechosistas hablan ya de que hay que seguir la ruta del dinero. ¿La ruta del dinero? No hay evidencias, pero es sospechosa la diferencia, el trato, a los lugares que sí abren y los que no pueden abrir. ¿Hay moche de por medio? ¿Es casualidad que siga el transporte público dando un servicio de aglomeraciones? ¿Los mercados rodantes que pagan piso a los gremios? ¿Los casinos, uy, los casinos? ¿Gimnasios? ¿Salones de fiestas infantiles?
¿No dan moche el Parque Ecológico Chipinque ni el Parque Fundidora ni el Parque La Estanzuela? ¿Tampoco los colegios privados? Piensa mal y…
“Por lo pronto no (habrá continuidad de Manuel de la O), y lo que sí les puedo decir es que vamos a poner a los mejores en esas áreas porque Nuevo León requiere el mejor talento tomando las mejores decisiones”.
Y Samuel fue tajante: “Por lo pronto, no”.
