A pesar de las múltiples evidencias del mal funcionamiento y fuente de corrupción que representaba el Fonden, y de que ya existe un amplio plan federal para atender las emergencias por desastres naturales, los partidos Revolucionario Institucional y Acción Nacional presentaron una iniciativa en la Cámara de Diputados recuperar el fondo destinado a ese tema, pero con reglas que eviten la corrupción.
Ante las críticas por la desaparición del Fondo de Desastres Naturales (Fonden) en momentos en que las lluvias han causado daños en diferentes estados, Morena recordó a los quejosos que “el gobierno federal atiende de manera directa las consecuencias de los desastres naturales y continúa asegurando el presupuesto para esos fines”.
Durante la sesión de ayer, el PAN presentó una iniciativa de reforma a la Ley de Presupuesto, para que en el Presupuesto de Egresos de la Federación (PEF) se destinen recursos a tres fondos: uno de desastres naturales, otro de apoyo social ante emergencias naturales y otro para atender a la población rural afectada por contingencias climatológicas.
Esta propuesta plantea que las asignaciones en el PEF para estos fondos, sumadas a las disponibilidades en las reservas correspondientes, en conjunto no sean inferiores a 0.4 por ciento del gasto programable.
Esto se da a consecuencia de que, durante la conferencia mañanera del pasado miércoles, el Presidente Andrés Manuel López Obrador denunció que las criticas por la desaparición del fondo para desastres son porque sus adversarios están desesperados por cuestionar a su gobierno porque no han podido frenar la transformación del país, pues el Fonden era un barril sin fondo del que se robaban entre 3 y 5 mil millones de pesos en cada desastre natural, porque que en otros sexenios cuando se registraba un desastre los proveedores vendían sin licitaciones despensas, catres, cobijas, palas, carretillas y “todo a precios elevadísimos”, y esa es la razón por la que se decidió su desaparición.
Para apoyar la iniciativa, el PRI aseguró que el Fonden contaba con más de 6 mil millones de pesos al momento de decretarse su extinción, sin embargo Morena corrigió esta aseveración, al indicar que el fondo enfrentaba “una deuda de 13 mil 123 millones de pesos, derivada de su operación”, debido a que “se convirtió en una caja chica del gobierno federal y de los gobiernos estatales”.
No obstante, el PRI insistió en que el Fonden contaba con recursos para “reconstruir caminos, infraestructura de comunicaciones, vivienda en zonas populares y marginadas”, y que “no era dinero para reconstruir colonias de alto poder adquisitivo, sino del que se podía disponer de inmediato para aliviar la desgracia de las familias en mayor condición de vulnerabilidad”.
Por su parte, el senador Julen Rementeria, con un ánimo tremendista que pretende alarmar a la población asignando la culpa de los fenómenos meteorológicos que han azotado el país en días recientes al Gobierno Federal, escribió un apocalíptico mensaje en su cuenta de Twitter.