Por Obed Campos
Antes que nada que conste: el nombre del alcalde del alicaído municipio de Escobedo, Nuevo León, no es Andrés Mijes ¿Lloverá…? Por aquello de la sequía. Es Andrés Mijes Llovera. Pero de que también hay sequía en el pueblo de no “Escobello”, como lo quiso bautizar una ex lideresa priista que se sacó la lotería y le dieron la silla de la alcaldía, la seca les ha pegado y bien duro.
Pero como diría la canción de José Alfredo, en referencia a lo que fue una de las “ultimas joyas” del bastión priista en el estado, Escobedo: ¿A dónde está el orgullo? ¿A dónde está el blindaje…?
Y ya ni modo que Mijes Llovera se ponga a escupir para arriba y alegue que así le heredaron el municipio, eso sí, con afiliación al partido Morena y toda la cosa…
Y la vocación violenta del municipio quedó descubierta otra vez, con el hallazgo de restos humanos, supuestamente los de una mujer, en un predio a un lado de la Carretera a Laredo, cerca, muy cerca del Motel Nueva Castilla, sí, ese infame negocio que se hizo famoso a nivel internacional por el feminicidio de Debanhi Susana Escobar Bazaldúa, cuyo cadáver fue encontrado en la cisterna del local.
Esta vez una llamada anónima alertó a las autoridades…
Es de ley preguntar a dónde quedó el Proxpol y toda la faramalla que presumía a nivel mundial y planetario Clara Luz Flores, cuando era alcaldesa.
Si ese “aparato” deveras funcionaba, entonces qué le pasó, o:
1.- Mijes Llovera no supo manejarlo y no sacó la bola del cuadro.
2.- “La maquinaria” se oxidó por falta de mantenimiento. Y eso que el general Hermelindo Lara Cruz sigue siendo el mandamás en asuntos de seguridad y casi casi tiene 10 años en el cargo, por lo que el programa proviene de su sapiencia.
3.- Proxpol era algo así como la tierra de la fantasía y nunca existió.
Y agréguele usted todas las que quiera, que al cabo eso no afecta a que Clara Luz cobre su quincena en el sistema federal de seguridad.
Porque como diría el buen Chava Potillo, pues “haiga sido como haiga sido”, la noticia de que se encontraron otro cadáver, y que sea de mujer, evita que la tierrita que se han empeñado en echarle encima al caso Debanhi sirva para taparlo, porque casos como este, nada más descobijan la inutilidad del sistema de seguridad del que se puede llamar “Bastión Morenista” de Nuevo León.
¿O con qué cuentas le va a salir Mijes a Clara Luz?
Peor: ¿Qué excusa le va a dar a Abel Guerra?