La pandemia de COVID-19 no sólo puso en riesgo los sistemas electorales, sino que en algunos casos, sirvió de excusa para intentar ampliar y concretar los poderes de los ejecutivos y diluir los mecanismos de control a los que deben estar sometidos los gobernantes, afirmó el Consejero Presidente del Instituto Nacional Electoral (INE), Lorenzo Córdova Vianello.
«Si uno hace un análisis de la democracia, lamentablemente en muchos casos la pandemia sirvió para el avance de la lógica autocrática que aqueja a las democracias. Lamento que mientras la pandemia está superándose, en muchos casos el poder no siempre regresó al cauce que constitucionalmente debe tener y sirvió de pretexto para que las pulsiones autoritarias se potenciarán».
Durante la presentación del libro «Elecciones Bajo el COVID-19 en América Latina», coordinado por Mario Alberto Garza, director del Centro de Desarrollo Político y Gobierno Transformativo de la Universidad Autónoma de Nuevo León (UANL) y el catedrático Manuel Alcántara Sáez, de la Universidad de Salamanca, el Presidente del INE explicó cómo se enfrentó el reto de organizar elecciones en tiempos de pandemia.
El libro citó, «destaca que la COVID-19 puso de manifiesto la importancia de contar con profesionales capacitados para gestionar los procesos electorales complejos, toda vez que los errores humanos técnicos o la manipulación del proceso en general pueden causar problemas de gobernabilidad para un país o deteriorar la democracia».