Tras la detención el pasado miércoles de tres personas vestidas de payaso en Ciudad Nezahualcóyotl, acusados de intento de secuestro, familiares protestaron este jueves al señalar que su profesión es la de entretener personas.
Los detenidos, vestidos de payasos, iban a bordo de una motoneta y se les detuvo acusados de intentar privar de la libertad a dos niños de 7 y 8 años de edad.
Sin embargo, posteriormente, familiares y amigos se manifestaron ante la Fiscalía General de Justicia a donde fueron trasladados, señalando que los dos payasos que fueron reconocidos por las presuntas víctimas (el tercero no lo fue), Gerardo alias “Tamborín” y Ulises, alias “Tony Pecas”, habían sido contratados para amenizar una fiesta de adultos.
Mientras buscaban el domicilio de su cliente, fue cuando se les acusó de querer robar a los niños.
Sara, esposa del payaso “Tamborín”, señaló ante las cámaras del noticiero “En Punto”:
“Él se dedica desde hace 15 años a ser payaso. Él buscaba la dirección que le marcó a la señora, la señora le indicó cómo llegar, los niños, ciertos niños le pedían globos, no se los dieron y fue ahí donde empezó la molestia”.
Por su parte, la propia Fiscalía General del Estado confirmó que ninguno de los payasos cuenta con antecedentes penales.