La especialista en negocios globales, Aribel Contreras, asegura que la administración del presidente Andrés Manuel López Obrador aplica los principios de política exterior dependiendo de sus coincidencias ideológicas con otras administraciones; informó MILENIO.
“La política exterior de México ha sido muy incosistente durante esta administración porque aplica los principios de la política exterior mexicana a modo, según si se trata de un gobierno de izquierda o de derecha”, explicó la Asociada del Consejo Mexicano de Asuntos Internacionales y Coordinadora de la Lic. Negocios Globales en la Universidad Iberoamericana.
En entrevista con MILENIO, la especialista en temas de medio oriente recordó que si bien México ha reprobado la escalada de agresiones de Israel tras la incursión de Hamás por la Franja de Gaza, decidió no condenar la invasión de Rusia a Ucrania.
“Esta administración ha condendo lo que ha sucedido en Gaza, porque recordemos que hablar de Palestina es hablar de dos territorios. La parte de Cisjordania y la parte de Gaza. Sin embargo México pierde credibilidad cuando condena lo que sucede en Gaza porque no condenó la invasión de Rusia en Ucrania”, detalló Contreras.
También recordó que México no reconoce a Palestina como un estado, a diferencia de Israel, con quien mantiene relaciones diplomáticas.
“México tiene relaciones con Palestina, con el gobierno, específicamente en Cisjordania, pero no reconoce a Palestina”, detalló.
Ante este panorama, aprovechó para explicar que es importante determinar si el contexto actual de la situación se vería beneficiado con un reconocimiento de Palestina como un estado.
“Si la coyuntura actual es el momento perfecto para que se reconozca Palestina o mejor no como lo ha hecho Irlanda, Noruega y España, si esto en realidad pareciera que quien sale ganando es Hamás o si esto en realidad abona a la paz o si esto se puede interpretar como que el hecho de reconocer ahorita a Palestina en esta situación va a agitar más la guerra”.
Finalmente, aseguró que México está buscando tomar distancia de temas de política exterior que puedan comprometer sus intereses o sus relaciones con aliados.
“México en particular está tomando su debida distancia y su medida cautela en cualquier pronunciamiento de un lado y del otro”, concluyó.
Imagen portada: Cuartoscuro