El joven de tez blanca y cabello quebrado era un gran tirador. Sobresalía, incluso, por encima de los sicarios de su cuerpo de guaruras. Siempre llevaba consigo un rifle con lanzagrandas y una pistola, listo para defenderse a él o a su padre. El Menchito, como le conocían en prisión, era un aficionado a las armas de fuego; reportó MILENIO.
Según varios testigos, El Menchito tenía dos armas, con las que iba a todos lados. Una pistola de mano .38 súper, y un rifle M16 camuflado con un lanzagranadas integrado. Las dos armas lo acompañaron incluso hasta el día de su detención, en junio de 2015.
“Él nada más traía su pistola en su piernera y su rifle camuflajeado de Menchito, con el numero 2 (…) tenía lanzapapas, lanzagranadas”, declaró Herminio Gómez Ancira, ex director de la policía de Villa Purificación, Jalisco, y también jefe de seguridad para los dos líderes del Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG).
El hombre asegura que fue una de las personas de mayor confianza para El Mencho y El Menchito, que les proveía de seguridad e información en la zona de las montañas de Jalisco. Incluso aseguró que pudo observar la habilidad del hijo del líder del cártel con su rifle de asalto, cuando practicaba en un descampado de su propiedad en Paso Real.
“Menchito era el único que le pegaban estaba como a 500 metros”, recuerda sobre esa escena, en la que el joven mexicano entrenaba junto a varios miembros del cártel. Incluso recuerda cómo eran los entrenamientos cuando se utilizaban los lanzagranadas. “le disparó a un carro viejo, como a 50 metros. Nada más se veía una gran explosión y quedaba un cochinero.”
El mexicano, además, no tenía miedo de utilizar sus armas. Las empuñó hasta el último momento, cuando lo arrestaron en Zapopan, Jalisco, el primero de julio de 2015. “Nos amenazaron con las armas y se nos alertó. Nos apuntaban con las armas (…) “que los dejáramos ir, porque eran Cártel Jalisco Nueva Generación”, recuerda un policía que participó en la detención del mexicano.
Herminio Gómez recuerda, además, que El Menchito y quienes lo acompañaban, tenían siempre un arsenal a la mano. “Tenía armas como AR15, cuernos, Barretts, lanzacohetes, minigun, lanzagranadas y granadas de fragmentación de mano (…) lo camuflajeado solo lo ocupaba el equipo de seguridad de El Menchito.”
Además, de acuerdo con varios testigos e incluso una serie de comunicaciones interceptadas, el mexicano era un aficionado a las armas de fuego. No solamente lograba conseguir armas de fuego provenientes de Estados Unidos, y de grado militar, para el cártel. Sino que las personas que buscaban congraciarse con él le regalaban estos instrumentos, como una conversación sobre un químico que producía drogas sintéticas y le habría regalado un fusil de asalto AK-47.
Su afición fue una de las piezas que la fiscalía estadunidense explotó para demostrar que el joven mexicano utilizó armas de fuego como parte de su negocio de tráfico de drogas. El M16 con tres de sus apodos y las temibles siglas del cártel fueron parte de la evidencia recurrente que se utilizó para que fuera encontrado culpable por un jurado en Washington a finales de septiembre de 2024.
¿Cómo opera el CJNG para proteger a ‘El Mencho’?
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