Jorge Zepeda Patterson, escritor y periodista, lanza Presidenta (Planeta), un retrato de la vida de Claudia Sheinbaum Pardo, mandataria de México, en el que asegura: “Quien dice que ella va a ser títere de Andrés Manuel López Obrador, simplemente no la conoce”; informó MILENIO.
El columnista de MILENIO diario se dedicó a investigar aspectos de la vida personal y profesional de Sheinbaum, como el activismo de sus padres en el 68, su temprano compromiso social, su educación humanista y la pasión por la ciencia; pero también el sueño de ser bailarina, su paso por la música, sus tatuajes y aspectos que quizá el lector no conocía de ella.
¿Qué opinas del momento histórico que vivimos el 1 de octubre?
Es un parteaguas con el arribo de una mujer presidenta después de 65 varones, eso representa un reto enorme. Creo que Claudia Sheinbaum fue muy hábil en asegurarse de que esa primera jornada fuera un símbolo, donde el gran protagonista fuera el hecho de que una mujer arriba al poder, porque había muchas expectativas: ¿cómo será ella? ¿cuánto habrá de continuidad? ¿cuánto de cambio? Pero al final, el gran tema fue algo que nunca más se va a repetir en la historia del país, la sensación de que estábamos inaugurando un momento histórico.
Incluso, donde el timbre de voz de ella se calentó, se emocionó, fue justamente cuando hizo esta larga parrafada sobre el hecho de que el triunfo de ella era el triunfo de todas las abuelas y madres que le habían precedido y las hijas y nietas que vendrán después.
¿Quisiste hacer un retrato humano de Sheinbaum?
Tal cual, porque al final, tras las campañas, incluso cuando votamos, todavía tenemos una noción de estos personajes hecha a través de retratos, de etiquetas, de caricaturas que se generan de ellos por la propaganda a favor o por la propaganda en contra, en términos absolutamente de blanco y negro. Nadie es tan heroína, tan milagroso y santo como lo pinta la propaganda favorable, ni tan satánico como lo pinta la contraria.
Lo que me importaba era desentrañar en carne y hueso quién es esta persona, cómo fue su infancia; sus aciertos, sus debilidades, sus fortalezas, sus fracasos- En fin, a lo largo de su vida personal y profesional como académica y posteriormente, obviamente, como funcionaria pública.
¿Descubriste muchas cosas al investigar?
El perfil arrojó cosas que yo no tenía claras en ese momento y que ahora comparto en este libro. Por ejemplo, el hecho de que ella, pese a lo que se ha dicho, no es un personaje radical, ni de una izquierda clandestina, como de repente se le atribuía, una dura del movimiento purista, sino más bien un personaje de clase media, progresista, urbana, de una familia ilustrada.
Ella, muy clavada en el tema de la investigación científica, a la que ha dedicado muchos más años, incluso, que a la administración pública. Luego, que ella es una nerd, por así decirlo, yo diría como un CEO, pero de la administración pública.
¿Cómo ha sido su carrera en la política?
Ella, más que de la oposición, siempre tuvo intereses políticos como progre, digamos, participó en demostraciones, en manifestaciones, etcétera, pero su vida estaba dedicada realmente a la academia. Y es solo cuando López Obrador la invita en el año 2000, cuando ella tenía 38, 39 años, para ser secretaria de Medio Ambiente del gobierno de la ciudad, es donde ella entra por vez primera a la política profesional y lo hace como administradora pública esencialmente.
Luego tendrá tres años como delegada y seis años como alcaldesa. Esa es su experiencia, y al examinar su desempeño lo que demuestra es que es probablemente el mejor cuadro de la administración pública que tiene este país en este momento: una izquierda con Excel para decirlo rápido.
El libro tiene una amplia investigación, pero al contar la historia, ¿cómo haces para que sea una lectura entretenida e interesante?
A mí me interesaba hacer un texto de fácil divulgación aunque tuviese detrás mucha investigación, datos. Prácticamente revisamos todas las entrevistas que ha hecho en su vida, que son muchas, no solo como funcionaria sino en las distintas campañas en las que ha participado, lo que se ha escrito sobre ella, lo que ella ha escrito. Entrevistamos a mucha gente. Pero, en efecto, la puesta en página es muy ágil y muy amena, eso me interesaba.
¿Revelas datos desconocidos?
Ella tiene muchos más capítulos en su vida, ya han salido algunos, pero se desconocían otros. Por ejemplo, que tiene sus tatuajes, alguna vez fumó marihuana, es muy lúdica, sobre todo musical, en su juventud le gustaban las peñas y quedarse hasta la madrugada, etcétera. Tiene un sentido del humor muy a botepronto, que lo hemos visto varias veces.
Yo la entrevisté largo, comimos un par de veces, es una charladora amena que se sale mucho de este encajonamiento, a veces tieso, en el que se le ha metido y trato de trasladarlo a esta historia que estoy compartiendo sobre ella.
¿Escribiste el libro para resaltar lo bueno de Sheinbaum o lo hiciste con el objetivo de mostrar quién es la presidenta de México?
Esencialmente para mostrar quién es. Aquí, desde luego, no hay retratos objetivos y el que diga que lo es, en realidad está escondiendo. Todos tenemos inclinaciones y yo coincido con muchas banderas de esta 4T, en el sentido, sobre todo, de ver por los que dejamos atrás, por los que menos tienen.
A mí me parece que eso es un principio ético, además imprescindible casi hasta por el bien de todos, porque este país no podía continuar indefinidamente dejando a la mitad de la población desdeñada, había que hacer un giro pendular para ver por ellos, si no corríamos el riesgo de perder la cohesión y la estabilidad política en este país.
Además de realizar un retrato de Claudia Sheinbaum, Jorge Zepeda Patterson hace algunas preguntas: ¿qué retos enfrentará en su sexenio?, ¿quiénes y cómo son los colaboradores que ha elegido para gobernar?, ¿qué podemos esperar de la primera presidenta de México?
¿También reflexionas sobre los retos?
Me asomé a su vida con ganas de ver cuáles son fortalezas pero también debilidades. Al final hago un capítulo sobre los desafíos que enfrenta y son tremendos, en algunos momentos me pregunto si tendrá con qué responder a algunos de ellos, si no será demasiado optimista en algunos de los planteamientos.
Yo he hablado con Claudia de estos duros desafíos, no son fáciles y los pongo en toda su magnitud como aspectos amenazantes para el éxito de su administración. Hay que ser cautelosos al respecto y trato de ser lo más honesto posible sin engañar a nadie.
¿Piensas que mucha gente no sabe bien quién es Claudia Sheinbaum?
Después de ver y contemplar todos estos datos de su vida, enterarme de lo que me enteré y lo que comparto al lector, me queda claro que Claudia Sheinbaum tiene una personalidad muy firme, ideas muy claras y quien dice que ella va a ser títere de López Obrador, simplemente no la conoce. Me quedaría con eso, me parece que todos vamos a ir aprendiendo quién es ella y espero que lo que descubramos confirme muchos aspectos de mi libro para bien de los mexicanos.
Imagen portada: Susan Crowley / MILENIO
