Por José Jaime Ruiz
En un reciente comunicado, el senador Waldo Fernández aseguró que para “lo único que se pone de acuerdo el MCPRIAN es para joder al ciudadano”. Para entender la condena de Waldo hay que decir que está en una campaña anticipada para competir por la gubernatura de Nuevo León en 2027. Su problema es la demagogia porque quien tiene un doble rasero propicia un doble discurso y, con ello, enseña el cobre de una doble moral.
“El senador de Nuevo León, Waldo Fernández, condenó hoy que tras años de conflicto entre Movimiento Ciudadano y el PRIAN, se pusieran hoy de acuerdo para aumentar el impuesto predial en distintos municipios, en detrimento de las y los nuevoleoneses”, se lee en el documento. En aras de la transparencia y la rendición de cuentas, el senador podría aclarar, para que no existiera ninguna duda de su defensoría social, cuánto le pega, como empresario de bienes raíces, pagar el impuesto predial de sus propiedades y si la motivación de su condena es como defensor público o defensor de sus intereses.
Como aspirante a la gubernatura de Nuevo León, el senador se inventa un MCPRIAN, pero como senador nunca condenó la incorporación de la familia Yunes en la Cámara Alta a la familia Morena para sacar adelante la reforma judicial, doble rasero, doble discurso, doble moral: “Después de años de conflicto político en Nuevo León, el MCPRIAN se unió, por fin, después de estarse peleando hasta por los buenos días. Se pusieron de acuerdo, como siempre ha pasado en los últimos nueve años, nada más para afectar al ciudadano”, reprobó Fernández.
El senador morenista Adán Augusto López dice que él es un político y lo que hace es política. Así operó para el voto de los Yunes, para la ausencia de un senador de MC para lograr la reforma judicial, para imponer a Rosario Piedra en la CNDH, así y así… lo que es condenable para millones de mexicanos que no votaron por Morena. Eso es lo que hacen las mayorías y las alianzas. ¿En el Senado sí se puede, pero en el Congreso de Nuevo León no? Doble rasero, doble discurso, doble moral.
En esta lógica distorsionada, ahora resulta que el senador de Morena, quien nunca ha gobernado un municipio, condena el aumento al impuesto predial que es progresivo y le pega, obvio, más a los ricos que a los pobres. ¿Ahora se trata de defender a los ricos, a los empresarios, a los enormes dueños de predios? Al paso, Waldo es un asiduo colaborador de un medio de comunicación de la familia Salinas Pliego donde Ricardo se resiste a pagar impuestos que favorecerían enormemente los programas sociales. ¿Qué piensa el senador de Morena del usurero Ricardo Salinas Pliego? ¿Es colaborador o colaboracionista? Doble rasero, doble discurso, doble moral.
“Llevamos nueve años metidos en un conflicto político, porque, acuérdense también, cómo a Jaime Rodríguez, el Congreso del Estado lo extorsionaba, y a Jaime le faltó talento para poder negociar con ellos. Al igual que Rodríguez Calderón, hoy también extorsionan al gobernador Samuel García. Nueve años de conflicto en los que no hemos podido resolver la crisis de los camiones, la contaminación, la inseguridad, la movilidad del agua”, lamentó.
Funcionario de alto nivel del gobierno de Jaime Rodríguez Calderón, asegura Waldo que a Jaime le faltó talento para “negociar” con el PRIAN. ¿A qué se refiere con negociar? Waldo se queja del MACPRIAN, pero él fue el que propuso formalmente un gobierno de coalición, de cohabitación o algo parecido. Como senador de Morena fue el primero que le levantó la mano, antes que resolvieran los tribunales, al priista Adrián de la Garza y nunca condenó la elección amañada de Lorena de la Garza, la extensión política del priista Francisco Cienfuegos, como presidenta del Congreso de Nuevo León. ¿MACPRIAN o PRIMOR? Fernández convoca a la unidad, pero ya dividió a la fracción de Morena en el Congreso local. El presidente Andrés Manuel López Obrador recomendó la política, no la poitiquería, recomendó en los políticos congruencia, coherencia, no zigzaguear, mantener las convicciones, los ideales contra viento y marea. Lo que no suena lógico suena metálico. Doble rasero, doble discurso, doble moral.
